Después de casi dos años y medio en el club, Matías Almeyda dirigió por última vez a Banfield, el equipo al que devolvió a Primera. Fue el partido número 98 del ex entrenador de River al comando del conjunto, cuatro meses antes de que terminara su contrato. Y sus jugadores le regalaron una goleada como despedida.

No venía bien últimamente Banfield, con apenas dos victorias en los últimos diez partidos del Torneo de Primera, con cuatro empates y cuatro derrotas, y la dura eliminación de la Copa Argentina, tras un contundente 0-3 ante Boca puso a Almeyda al borde de la decisión. Bajo su conducción, el equipo siempre jugó de manera atrevida y desafiante, lo que posibilitó buenos resultados como el de anoche, pero también algunos momentos difíciles. La sensación de que se había cumplido un ciclo llevó a Almeyda a tomar la determinación final pese a contar con el respaldo de la dirigencia. Para reemplazarlo ayer sonaban entrenadores como Jorge Almirón, Javier Sanguinetti o Jorge Burruchaga.

Con la goleada, en la que se destacó el tanto de tiro libre de Cazares –que corrió a abrazar al técnico saliente–, Banfield suma 29 puntos, mientras Arsenal sigue anteúltimo con 14.

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