Facundo Sava quiere que la tercera sea la vencida para Racing. El jueves pasado, en su primer encuentro al frente del equipo, el conjunto de Avellaneda cayó 4-2 ante Estudiantes. El segundo tropiezo, más sorpresivo todavía, llegó el sábado cuando los titulares perdieron ante Defensores Unidos de Zárate, que milita en la C. Por eso el objetivo ahora pasa por recuperarse ante un rival de fuste como Boca, mañana a las 22.10, en la segunda jornada de la Copa de Oro que se disputará en Mar del Plata, en el Minella, con arbitraje de Germán Delfino.

En el entrenamiento de ayer los futbolistas comenzaron los ejercicios con activación física en las instalaciones del Club Atlético Kimberley, para continuar con el plantel dividido en dos grupos: uno realizaba tareas con pelota con combinaciones en la zona de ataque, en tanto el otro se movía en la cancha aledaña, donde llevó adelante tareas de salida conjunta entre defensores y mediocampistas. A su vez los lesionados, Lisandro López (desgarro en el aductor de su pierna derecha), Carlos Núñez (distensión en el aductor izquierdo), Gastón Díaz (desgarro en el gemelo interno de la pierna derecha) y Ezequiel Videla (recuperándose de una operación de pubialgia realizada en noviembre) realizaron trabajos diferenciados a un costado del campo de juego.

Aunque el fútbol ofensivo es una de las características principales en la idea de Sava, como evidenció en su gestión en Quilmes, en busca de darle más equilibrio a su nuevo equipo se inclinaría por un esquema 4-4-2, en el que la dupla de ataque la conformaría Diego Milito y Gustavo Bou.