El seleccionado argentino de rugby, Los Pumas, en su versión de Seven a side, perdió ayer ante Nueva Zelanda 17-14 y finalizó sexto en el torneo de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro. En el primer turno, Argentina había superado agónicamente a Australia 24-21 y tenía la chance de escalar una posición más en el certamen, pero los All Blacks lo privaron del quinto peldaño.

Contra Australia, los dirigidos por Santiago Gómez Cora dieron vuelta ya en tiempo cumplido un partido que arrancaron perdiendo 21-0, con un try de Matías Moroni, que luego convirtió Gastón Revol. Justamente entre esos dos jugadores se repartió el goleo de los Pumas, con 16 puntos de Revol y 10 de Moroni.

Por la tarde, Los Pumas no arrancaron bien contra Nueva Zelanda, ya que un try de Akyra Ioane puso las cosas arriba 5-0 para los oceánicos.

En el complemento, los All Blacks otra vez golpearon de entrada y de la mano de Tim Mikkelson estiraron a 10-0 la ventaja. Un nuevo try oceánico, con la autoría de Ryeko Ioane, más la conversión de Gillies Kaka, agrandó la brecha 17-0. Allí apareció la garra de Los Pumas, que con dos tries de Juan Imhoff (conversión de Gastón Revol) y Matías Moroni (conversión de Revol) achicaron la distancia final a 17-14.

El rugby regresó a los Juegos Olímpicos después de 92 años y Argentina perdió en cuartos de final con Gran Bretaña en tiempo suplementario, resultado que le impidió pelear por una medalla.

Por otra parte, el ex capitán de Los Pumas y flamante vicepresidente de la World Rugby, Agustín Pichot, presente en el estadio, se refirió a la experiencia del Rugby en estos Juegos Olímpicos. “No tengo duda, esta experiencia ha sido maravillosa, única”, manifestó Pichot, quien aseguró que para él “habría sido un sueño participar en un Juego”.

Anoche se difinieron las medallas en la especialidad. La de oro se la quedó Fiji, que era uno de los máximos candidatos, tras vencer en la final a Gran Bretaña por 43-7. Los fijianos lograron así la primera medalla olímpica para su país. En tanto que, la medalla de bronce quedó para los sudafricanos, que se impusieron por paliza 54-14 frente a los japoneses.