El seleccionado argentino de hockey sobre césped masculino luce sus medallas en lo más alto del podio.

El seleccionado masculino de hockey sobre césped alcanzó ayer la gloria eterna y obtuvo la medalla de oro en Río de Janeiro, tercera del país en estos Juegos Olímpicos, tras superar en la final a Bélgica por 4-2. El equipo dirigido por Carlos “Chapa” Retegui (que sumó así su segunda medalla como DT tras la de plata con Las Leonas en Londres 2012) se impuso con temple y personalidad, a partir de los tantos conseguidos por Pedro Ibarra, Ignacio Ortiz, Gonzalo Peillat y Agustín Mazzilli. Los descuentos del conjunto belga fueron obra de Tanguy Cosyns y Gauthier Boccard. Más de dos mil simpatizantes argentinos vivieron una verdadera fiesta y brindaron un conmovedor respaldo a un conjunto que fue de menos a más y que terminó siendo un campeón más que merecido.

“Esto empezó hace tres años y medio, cuando Aníbal Fernández (ex presidente de la Confederación Argentina de Hockey sobre césped) nos ofreció hacernos cargo de los chicos y hoy estamos en el cielo olímpico porque este título quedará para toda la vida en nuestros corazones”, comentó el Chapa Retegui luego de la gesta, y de inscribir su nombre en la historia grande del deporte argentino. “Este es un premio para el hockey y el deporte argentino, y para todos los jugadores que defendieron la camiseta argentina con el corazón”, enfatizó. “Amo a mi país y me siento orgulloso de ser argentino. Estoy contento y lo comparto con toda la gente. Desde el que nos cuida la cancha, a la gente de la portería, a todos. Llegamos con el apoyo de la Argentina y de todos los que acá estuvieron con nosotros. Esto lo ve el mundo entero. Es un premio al deporte argentino”, agregó.

Por su parte, el volante Lucas Rossi explicó: “No vinimos a participar en el campeonato, soñamos con esto desde el primer día y lo logramos merecidamente. Sentimos muchas emociones, es el trabajo de toda una vida, el premio a entrenar, a no bajar nunca lo brazos y esto es la gloria total. Sin dudas es lo máximo que podemos lograr”. “Lo importante es no darse por vencido cuando hay momentos complicados como las lesiones que me tocaron sufrir pero hay que seguir siempre para adelante. Todo es aprendizaje”, argumentó. Y apuntó: “Somos un equipo donde no todos somos perfectos y somos trabajadores. Dudo que otro plantel se haya entrenado tanto como lo hicimos nosotros”.

Por otro lado, delantero Lucas Vila admitió: “No puedo creer que seamos los mejores del mundo”. “Ahora habrá que mantenerse en lo más alto de todo, sin olvidarnos desde donde venimos y que hace cuatro años terminamos como décimos en los Juegos de Londres”, afirmó el jugador del TMHC Tilburg, de Holanda. “Le quiero dedicar la medalla a mi familia, a mis entrenadores del Banco Provincia, a mis amigos porque en las malas siempre me acompañaron y a toda la gente que estuvo siempre a mi lado”, consideró Vila.

El delantero Facundo Callioni señaló: “todavía no nos dimos cuenta. Sufrimos dos bajas, entraron los pibes y dejaron la vida. Habíamos visualizado ésta medalla desde el primer día. Sabíamos que íbamos a ganar y nos sentíamos campeones desde antes”, confesó, y agregó: “Fuimos un poco tapados por la generación de Las Leonas, pero éramos conscientes que trabajabamos a la par se nos iba a dar. En el hockey se trabaja muy bien, los clubes lo hacen muy bien. Esto es de todo el hockey, no importa si es masculino o femenino”, sentenció.

Por último, volante Ignacio Ortíz, quien tuvo su primera experiencia olímpica, y en la final aportó un gol, aseveró que “no sabía ni cómo festejarlo”. “Estaba muy concentrado y no sabía qué hacer”, reconoció. En relación al desempeño en todo el certamen, sostuvo: “Hicimos un torneo perfecto”.

El equipo nacional formó con: Juan M. Vivaldi; Juan Gilardi, Pedro Ibarra y Gonzalo Peillat; Ignacio Ortiz, Lucas Rossi, Juan López y Manuel Brunet; Facundo Callioni, Lucas Vila y Agustín Mazzilli. E ingresaron Luca Massó, Juan Saladino, Lucas Rey, Joaquín Menini e Isidoro Ibarra.