Mié 11.08.2004

DEPORTES

Cuando la plata nunca alcanzaba

La Selección Argentina logró dos medallas plateadas, en Amsterdam 1928 y en Atlanta 1996. Roma, Tokio y Seúl fueron desastres.

El fútbol argentino soporta una única recurrente frustración: la de no haber podido ganar nunca el oro olímpico pese a que los seleccionados albicelestes jugaron dos finales, la de Amsterdam 1928 (perdió ante Uruguay) y Atlanta 1996 (fue superado por Nigeria), por lo que Atenas 2004 es una excelente chance para alcanzar la soñada medalla de oro.
En los albores del fútbol, a la Argentina no le importaban los Juegos Olímpicos y si compitió en Amsterdam, en 1928, se debió a que Uruguay logró el oro en París ’24 y sintió lastimado su orgullo en la lucha por ser el mejor rioplatense.
Cuando se decidió a participar de los Juegos cometió el pecado de la improvisación, con equipos armados a último momento y con jugadores que debieron reemplazar a otros que por distintos motivos tuvieron que eludir la convocatoria. La desigualdad con los rivales en los Juegos de Roma 1960 y Tokio 1964 no pudo pasar inadvertida. En esas ocasiones, se compitió con equipos juveniles porque no podían participar jugadores profesionales, mientras que los rivales, especialmente los de Europa del Este, estaban integrados por jugadores que ejercían un encubierto profesionalismo.
Hasta 1924, el fútbol olímpico era un especie de campeonato europeo y los argentinos se conformaban con jugar casi mensualmente ante uruguayos y brasileños. No obstante, en ese año Uruguay se floreó en París y Argentina se decidió a enfrentarlos en Amsterdam 1928.
Con las gambetas y la fuerza de Orsi, Cherro, Monti y Tarascone, los argentinos golearon sucesivamente 11-2 a Estados Unidos, 6-3 a Bélgica y 6-0 a Egipto y llegaron a una previsible final ante los uruguayos.
En la primera final empataron 1-1 con goles de Ferreira para la Argentina y Petrone para los orientales; por lo tanto, debió jugarse otro partido, que los uruguayos ganaron 2-1, con un gol en clara posición adelantada.
Pasaron 32 años hasta que el fútbol argentino volviera a concurrir a los Juegos Olímpicos, pero en Roma recibió un doloroso cachetazo como premio a la arrogancia. El ambiente futbolístico subestimó a Dinamarca, pero los europeos mandaron de vuelta a Buenos Aires a un seleccionado que incluía a Rendo, Bilardo, Oleniak y Zarich, entre otros, ganándole 3-2. De nada sirvieron posteriores triunfos, 2-1 ante Túnez y 2-0 sobre Polonia.
Cuatro años más tarde, en Tokio, fue el turno de una de las peores derrotas del fútbol argentino: la eliminación a manos de Japón, que ganó 3-2, pese a que en el equipo nacional jugaron Cejas, Mori, Perfumo, Tojo, Bulla y Malbernat.
Luego de otros 24 años de ausencia, el seleccionado argentino volvió a los Juegos Olímpicos en Seúl 1988. Pero San Lorenzo, River y Newell’s se negaron a ceder a sus jugadores porque estaban participando de la Copa Libertadores. El equipo, dirigido por Carlos Pachamé y con jugadores como Islas, Fabbri, Simeone, Siviski, Hugo Pérez, Alfaro Moreno y Claudio Cabrera, empató 1-1 con Estados Unidos, perdió 1-0 con la Unión Soviética –que luego ganaría la medalla dorada–, venció 2-1 a Corea y cayó en cuartos, 1-0 con Brasil.
Finalmente, participó en Atlanta 1996 con la dirección técnica de Daniel Passarella y un equipo con jugadores del nivel de Hernán Crespo (que terminó siendo el goleador de los Juegos), Marcelo Gallardo, Diego Simeone, Claudio López o Roberto Sensini. En cuartos de final goleó 4-0 a España, en semifinales Portugal cayó 2-0 y en la final el rival fue Nigeria. Argentina estuvo al frente en dos ocasiones, con tantos de López y Crespo, pero no pudo mantener el resultado. Pero sobre la hora, la Argentina realizó mal la jugada del fuera de juego, Sensini quedó enganchado y Amunike venció a Cavallero para poner el 3-2 definitivo, un resultado particularmente ingrato para la historia del fútbol argentino en los Juegos.

(Versión para móviles / versión de escritorio)

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS rss
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux