Luego de 18 meses de inactividad, finalmente Ariel Ortega volverá a jugar al fútbol de manera oficial. Su nuevo club, Newell’s, destrabó el conflicto que el jugador mantenía con el Fenerbahce de Turquía, que amenazó con clausurar definitivamente la carrera del delantero, que en algún momento amagó con el retiro. Los rosarinos se comprometieron a pagarle a la entidad turca 3,5 millones de euros, en siete cuotas consecutivas de 500 mil euros cada una, a partir de enero próximo. De todas maneras, desde Turquía pidieron 24 horas para analizar los avales (los derechos de formación que recibe la AFA y el pase de Mauro Rosales serían las principales garantías) presentados por la institución presidida por Eduardo López. Si todo se resuelve favorablemente, Ortega integraría el equipo titular el próximo domingo ante Vélez, por la primera fecha del torneo Apertura. El último encuentro del futbolista fue en febrero de 2003, con el seleccionado argentino, en Amsterdam, en el empate en un gol con Holanda.
El jefe de prensa de Newell’s, José García, confirmó ayer la resolución de las negociaciones y luego señaló que “la llegada de Ariel Ortega a Newell’s y su vuelta al fútbol profesional es un impacto político y periodístico muy importante”. Y agregó: “Newell’s logró lo que no pudo hacer River, pero esto comenzó con una decisión política de (el presidente) Eduardo (López), junto con el representante del jugador, y él fue quien llevó esto adelante con todo”.
Newell’s logró el acuerdo con el Fenerbahce a través del aquel pago, como indemnización a ese club por el abandono de trabajo en el que había incurrido Ortega a principios de 2003. La llegada del jugador se concretó a través de una gestión en la que participaron los vicepresidentes del club Mauricio Nudemberg y Rubén Yacopino, con el respaldo del presidente de AFA y vicepresidente de FIFA, Julio Grondona.
“Ortega será presentado oficialmente el jueves (por mañana) a las 20 en el estadio, en una ceremonia similar a la del año pasado, cuando presentamos al equipo del Centenario, en la que participarán los jugadores, socios y simpatizantes, y en la que habrá fuegos artificiales”, anticipó García.
En el último trimestre del año pasado, River había efectuado algunos intentos para solucionar la delicada situación en la que se encontraba el jujeño, pero nunca tuvo éxito. Pero ahora éste será un momento de gran emoción para los hinchas de Newell’s, similar al que vivieron cuando el club logró incorporar nada menos que a Diego Maradona, en 1993.