Julio Falcioni, que había renunciado sorpresivamente a su cargo de entrenador de Banfield al término del partido contra Almagro, el miércoles por la noche, aceptó las explicaciones del presidente del club, Carlos Portell, y continuará trabajando con el equipo. Falcioni discutió con el vice Raúl Baud después de protestar por la presencia de particulares en el vestuario tras la victoria, y ofuscado por la disputa anunció su renuncia en una radio. Portell aseguró que la deuda que el club tiene con el técnico no tuvo relación alguna con el incidente: “Este club ha logrado muy buenos resultados deportivos demasiado rápido, y quiere seguir creciendo”, dijo.