Vélez se fue feliz de Mar del Plata. Con una actuación apenas discreta, el equipo de Liniers se impuso 1-0 a Huracán de Tres Arroyos con un gol de volea de Lucas Castromán y le puso presión al resto de los equipos, que ahora deberán ganar para no perderle pisada. Incluso, el único que lo puede alcanzar es Newell’s. Por eso, los jugadores y los hinchas se fueron cantando el clásico “Que vamos a salir campeones...”.
Cada uno con sus armas salió dispuesto a imponer sus condiciones. Los locales se basaron en un intento de buen toque de balón, pero se mostraron demasiado lentos y repetitivos como para sorprender al puntero. Por el contrario, Vélez apostó a la presión asfixiante y a la salida rápida para buscar sus oportunidades. Con ese choque de estilos, el partido quedó sumergido en la mitad de la cancha, sin muchas oportunidades frente a los arcos. Apenas se acercaban con remates desde larga distancia y con alguna jugada con pelota detenida.
Con el correr del juego, Vélez comenzó a prevalecer en el desarrollo. Sus volantes se imponían a sus colegas tresarroyenses, aunque en el ataque, al equipo de Alberto Fanesi le costaba generar situaciones. Tanto que la más clara fue un envío de Malagueño contra su propio arco, tras un centro de Bardaro, que Pardal sacó al corner. Pero la insistencia de Vélez tuvo su premio sobre el final de la primera etapa. Luego de un corner que rechazó la defensa de Huracán, Castromán empalmó la pelota de volea desde el borde del área. Si bien el remate parecía ir al arco, un ligero desvío en Malagueño fue determinante para que Pardal no alcanzara a rechazar. Lo curioso es que el gol llegó tras una maniobra similar del ex volante de Lazio, aunque en esa ocasión Pardal respondió bien sacando el tiro por un costado. A esa altura, la diferencia era justa por lo que mostraron ambos.
Con Vélez en ventaja, el partido se tornó más entretenido. Es que los locales se adelantaron en el terreno y dejaron espacios para el contragolpe del líder, que se sintió más cómodo con ese sistema. De esa forma aparecieron algunas situaciones de peligro. Huracán pudo empatar con una entrada de Dragojevich y un cabezazo de Estévez, pero en ambas ocasiones salvó Fuentes, mientras que Vélez tuvo la chance de aumentar con un remate de Gracián. Sobre el final, Huracán buscó la igualdad con desesperación, pero el líder se mantuvo firme y se llevó la victoria. Esa victoria que le permite quedar puntero y esperar tranquilo a que juegue el resto.