Mientras disfruta de la punta en soledad en el torneo Clausura, River intentará hoy comenzar con éxito la segunda ronda de la Copa Libertadores. El equipo conducido por Ramón Díaz recibirá a Gremio de Porto Alegre, en el encuentro de ida por los octavos de final. A pesar de que esté cada vez más cerca de adjudicarse el campeonato local, el certamen sudamericano también es un anhelo de la institución. Sobre todo, después del bicampeonato conseguido por su máximo rival bajo el mando de Carlos Bianchi. La última vez que River obtuvo la Copa fue en 1996; entonces disputó y perdió la Intercontinental ante la Juventus de Italia.
En la práctica futbolística que el plantel estaba desarrollando en la cancha auxiliar, Ariel Ortega –que se supone que volvía hoy– se tomó la pierna derecha cuando apenas habían pasado diez minutos y, de jugar para el equipo titular, pasó a ser revisado por el doctor Rafael Giulietti. En el caso de que juegue hoy, Ortega lo haría unos metros más retrasado de lo habitual, ocupando la plaza de Andrés D’Alessandro, quien terminó bastante golpeado el encuentro del domingo ante Chacarita. De esta manera podría ingresar como titular el ex Quilmes Alejandro Domínguez. De lo contrario, el que saldrá será Ortega.
“Domínguez tiene muchas posibilidades de jugar mañana (por hoy), seguramente por D’Alessandro, que no está plenamente recuperado del partido con Chacarita”, anticipó ayer Díaz, cuando el jujeño no presentaba problemas físicos. Con la inclusión de Domínguez, quien respondió satisfactoriamente cada vez que le tocó participar en la Copa, único torneo para el que se encuentra habilitado, River presentaría una formación más ofensiva, ya que contaría con tres delanteros.
Por su parte, los brasileños, que llegaron el lunes por la noche a Buenos Aires, tratarán de rescatar como mínimo un empate que les otorgue el margen suficiente como para volver a su país con las expectativas intactas de clasificar. El Gremio viene de perder por 5-1 ante el Atlético Paranaense, que lo dejó mal posicionado en el torneo regional Sul Minas.
El técnico brasileño Leonardo Bachi está decidido a incluir entre los titulares al delantero Luizao, en reemplazo del lesionado Luis Mario, para formar la dupla ofensiva junto a Rodrigo Mendes, que también retorna en sustitución de Grafite, quien precisamente perdió su puesto en la derrota del último sábado. Luizao, que lucha por un lugar en el seleccionado brasileño para el mundial de Corea y Japón, llegará con el buen recuerdo de una gran actuación registrada en el estadio Monumental hace cuatro años, cuando jugaba en el Vasco da Gama, y luego los de Río de Janeiro lograron ganar la Copa Libertadores de 1998.