Lejos de querer alimentar los rumores de una división entre jugadores juveniles y veteranos, los principales referentes del plantel boquense evitaron entrar en cualquier tipo de polémica a raíz de la destacada actuación de los juveniles en el torneo de verano, en especial en el último superclásico. Tras la práctica matutina realizada ayer en Casa Amarilla, Martín Palermo, Raúl Cascini y Andrés Guglielminpietro coincidieron en que la aparición de nuevas figuras siempre es positiva y en que esto no va a generar un conflicto interno.
“Uno solo no gana un campeonato, esto es en grupo. Ni los grandes ni los chicos, todos juntos. Esto es sólo un juego del periodismo, pero no es algo que nos preocupa. Tenemos que mantenernos al margen. Los chicos saben que tienen nuestro respaldo y son ellos lo que nos ayudan a recapacitar que nadie tiene el puesto comprado”, manifestó Palermo, quien junto al colombiano Fabián Vargas (que hoy se realizará una resonancia) trabajó ayer en forma diferenciada debido a una fatiga muscular; el resto del plantel realizó ejercicios físicos durante unas dos horas.
El volante Cascini festejó también la aparición de juveniles, aunque buscó tomar distancia al señalar que “los chicos siempre son necesarios, pero hay que ver también quién los guía: entrenador, dirigentes y jugadores”. Sin embargo, admitió que se “bancaría” ser desplazado por alguno de los juveniles. “Sé que la gente de Boca no se olvida de todo lo que le dimos. Igualmente esto no es un problema para nosotros y yo me bancaría un Boca campeón con Cascini afuera”, sostuvo.
Guglielminpietro, quien no quiso hacer hincapié en esta cuestión y prefirió hablar sobre el triunfo ante River, señaló que “los chicos respondieron bien y esto es bueno para tener un plantel amplio y saber que en todos se puede confiar”. Y sobre el superclásico, opinó: “Jugamos un buen partido y esto es un parámetro para saber cómo estamos físicamente. Siempre va a haber cosas para mejorar, pero lo importante es que estuvimos muy precisos, lo cual siempre es lo más difícil de conseguir. Es cierto que siempre es lindo ganarle a River, pero solo sirve de preparación”.
Por su parte, el juvenil Pablo Ledesma, una de las figuras y autor de un golazo en el último superclásico, se mostró feliz por el momento que atraviesa y mencionó que el plantel de Boca está unido y pensando en lo que tiene por delante. “En Boca todos tiramos para el mismo lado. Venimos trabajando muy duro y ahora se vio un poco el trabajo que veníamos haciendo. Acá hay un grupo de jugadores grandes y juveniles, que solo piensa en sacar adelante a Boca”, mencionó el volante, que también destacó las oportunidades que el técnico Jorge Benítez les está dando a los juveniles. “Obviamente, con la continuidad, el jugador va adquiriendo confianza. Yo soy un luchador y espero el momento, estoy a disposición del entrenador y él es en definitiva el que decide. En Boca hay muchos buenos jugadores y eso es lindo porque así se le hace más difícil la elección a Benítez.”