David Nalbandian debutó con un triunfo en el Masters Series de Madrid y luego coincidió con Juan Chela y Agustín Calleri en que “la infraestructura del tenis argentino no está a la altura de la potencia que es”, como habían asegurado sus compatriotas el lunes. Nalbandian se impuso 7-6 (7-1), 6-3 al austríaco Jurgen Melzer, mientras José Acasuso batió al ruso Mikhail Youzhny 6-7 (5/7), 6-4, 2-0 y abandono. En cambio, Calleri cayó 6-3, 4-6, 6-4 frente al español David Ferrer.
Nalbandian descartó una “mano negra” en los casos de doping que afectan a los tenistas argentinos. “No importa que sean la mayoría argentinos, suecos o suizos, no se puede juzgar a diez personas por igual. Cada jugador tiene su cuerpo técnico, pero la infraestructura no está a la altura de los jugadores, no sólo es un tema de doping”, dijo. “Tenemos que actuar como la potencia que somos”, había dicho Calleri. “Hay que copiar a las mejores federaciones”, coincidió Chela, que hoy se mide con el sueco Thomas Johansson.
Nalbandian recordó que tanto él como Guillermo Coria son en buena parte un producto de la promoción del tenis encarada en los ’90 por Enrique Morea, presidente de la Asociación Argentina de Tenis (AAT). “Coria y yo tuvimos el apoyo desde chicos, pero ahora falta apoyo a los juveniles”, señaló. Coria se presentará hoy frente al belga Oliver Rochus.
También Mariano Puerta debutará hoy en un enrarecido partido, con el trasfondo de su presunto doping presente en la mente de espectadores y colegas. “No voy a hablar de ese tema. Hablo de cualquier cosa, pero de ese tema no”, dijo un tenso Puerta, que jugará ante el bielorruso Max Mirnyi.
El doping denunciado por L’Equipe está en boca de todos en el Masters Series madrileño, en el que Puerta se mueve intentando mostrar naturalidad, aunque eso no sea sencillo dada su situación.
El domingo vio, junto a otros jugadores, River-Boca y entrenó en los dos últimos días acompañado por su técnico, Guillermo Pérez Roldán. Puerta, como Nalbandian, busca sumar puntos para entrar al Masters ATP de Shanghai. “Es raro verlo aquí, pero como no es oficial, sólo se puede esperar”, dijo el alemán Tommy Haas. “Habrá que ver si se lo suspende por el resto de su vida. Pero no es la primera vez que le pasa, por eso se lo mira de otra manera.”