DEPORTES
› DANIEL MONTENEGRO Y EL MOMENTO DE RIVER
“Es difícil no jugar por nada”
Lejos de la punta del Apertura, fuera de la Copa Sudamericana, sin haberle podido ganar a Boca, el rival tradicional, el superclásico, River no vive con dicha los días del presente y sus futbolistas sienten el vacío de cierta frustración. “Es difícil no pelear por nada –opinó ayer Daniel Montenegro, uno de los atacantes del plantel de Reinaldo Merlo–, así que la meta desde ahora hasta fin de año es ganar todos los partidos que quedan” aunque en los números finales ese objetivo represente poco. “Este es un club que se exige día a día”, subrayó.
“Los únicos responsables del presente futbolístico que atraviesa River son los propios jugadores”, admitió Montenegro, que fue titular en el clásico contra Boca. Quedan 24 puntos por jugarse y el equipo de Núñez marcha a 10 unidades del líder, el conjunto de Alfio Basile. “Ahora lo más importante es terminar bien el año y ganar todos los partidos que nos quedan para afrontar el próximo semestre de la mejor manera”, señaló.
Montenegro fue bien tajante al apuntar que los futbolistas de River no lloraron “ni nada por el estilo”, en referencia a las jugadas polémicas que ocurrieron en el clásico sino que solamente protestaron porque el árbitro Rafael Furchi ignoró dos penales en su favor. “Nosotros protestamos porque creíamos que habían sido penales. Acá nadie lloró ni nada por el estilo. A mí pocas veces me van a ver protestar algún fallo del árbitro, pero dije lo que creía.” Algunos dirigentes de River evaluaron la posibilidad de una protesta judicial por el tema, pero fue desechada, en lo que se pareció más a una actitud de presión sobre futuras designaciones de árbitros que a una fundada reacción.
Desde que Reinaldo Merlo se hizo cargo del plantel, tras la inesperada renuncia de Leonardo Astrada al caer 4-1 ante Banfield, River jugó siete partidos por el Apertura, de los cuales perdió cuatro (con Arsenal, Vélez, Estudiantes y Olimpo), ganó dos (con Colón, en el estreno del técnico, y con Independiente) y logró un empate, ante Boca, sumando apenas el 33 por ciento de los puntos en juego. Reunió 7 puntos en siete fechas, los mismos que había sumado bajo el mando de Astrada en las primeras cuatro fechas. Además, fue eliminado por el Corinthians de la Copa Sudamericana al empatar 0-0 de visitante y 1-1 de local en el último minuto. Volverá a jugar recién el domingo 30 en Rosario ante Central.