DEPORTES › SAN LORENZO DERROTO 1-0 A GIMNASIA EN JUJUY
El equipo de Oscar Ruggeri volvió a ganar en el Clausura después de tres fechas. Los dos conjuntos terminaron con diez hombres.
Sin jugar bien, pero mostrándose más sólido que en sus últimas tres presentaciones, San Lorenzo se impuso ante Gimnasia y Esgrima de Jujuy por 1-0, gracias a un golazo del defensor Adrián González. La figura fue el arquero Sebastián Saja, quien impidió varias veces que los jujeños, que hasta ayer no habían perdido como locales en este torneo, empataran el trámite.
No fue bueno el arranque del partido, ya que a los dos conjuntos les costaba jugar la pelota y ponerla en contacto con los delanteros. Los locales, cuando se serenaron, lograron imponer su ritmo y entonces sí llegaron al arco de Saja con relativo peligro. En el mejor momento del conjunto jujeño, estuvieron cerca de anotar Héctor Silva y Gustavo Balvorín, pero sus intenciones no prosperaron, como tampoco lo hicieron los remates de media distancia del veterano Daniel Juárez.
El conjunto de Oscar Ruggeri, empujado con cierta firmeza desde su última línea, comenzaba a perder fuerzas en el mediocampo, donde sólo se destacaban Diego Mateo y Diego Rivero, y eso hacía que sus delanteros, el paraguayo Cardozo y Leonardo Ulloa, prácticamente no tuvieran contacto con la pelota. La prueba está en que la llegada más clara había sido un remate desde afuera del defensor Adrián González, a los 24 minutos.
Y fue precisamente González, con otro violento remate desde afuera, quien consiguió abrir la cuenta sobre el final de la primera parte, luego de un error defensivo de Maxi Salas, quien rechazó muy mal una pelota y terminó habilitando al defensor, que acechaba desde fuera del área y puso su remate en el ángulo derecho del arco de José Valdiviezo.
Con el ingreso de Javier García, por Juárez, los locales mejoraron un poco su juego y así tuvieron varias chances para la igualdad: un cabezazo de Silva y un remate de Balvorín, que Sebastián Saja, a esa altura figura entre los de Boedo, consiguió controlar.
Cuando la producción de su equipo parecía entrar a un nuevo pozo, Ruggeri metió mano en el banco e intentó contrarrestar con los ingresos de Darío Bottinelli y Matías Verón por Montillo y Cardozo. La suerte acompañó al equipo de Boedo, ya que cuando Gimnasia volvía a atravesar un buen momento sufrió la expulsión de Fabio Pieters, por doble amonestación, y eso le quitó resto al equipo de Mario Gómez.
En el último tramo del encuentro, más allá de la pelota que Saja volvió a sacarle a Silva, impidiéndole el empate, San Lorenzo se serenó y logró llevarse un triunfo tan esperado como necesario.
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