DEPORTES › OPINION
› Por Diego Bonadeo
Por allá, antes de promediar la década del ’50, cuando a Dante Panzeri lo confinaban en El Gráfico, casi despectivamente, a lo que daban en llamar “deportes varios” –el Dante se ocupaba habitualmente de ciclismo y natación, además de su recordadísima y brillante cobertura de los Juegos Panamericanos de México en 1955–, los sedicentes comentaristas de fútbol de la época se hubieran limitado a escribir y decir “los ataques superaron a las defensas”. Afortunadamente, con la irrupción en la radio de “Fútbol al centímetro” con las tres “pes” –Adolfo Pedernera, Pepe Peña y Dante Panzeri.., más la incorporación a El Gráfico de Pepe, Ernesto Lazzatti y Osvaldo Ardizzone –Osvaldo era por entonces empleado contable de la Editorial Atlántida–, el oxígeno esclarecedor de todos ellos hizo que a muchos jóvenes de aquel entonces comenzara a abrírsenos la cabeza en cuanto a terminar con la lampiña objetividad con que prácticamente todos comentaban fútbol.
Estupideces parecidas, que a veces más que estupideces sonaron y suenan a excusas casi falaces, se fueron sumando a “los ataques superaron a las defensas” si había goleadas o, al revés, “las defensas superaron a los ataques” si los resultados eran 0-0; “partido perfecto” para quienes confunden el fútbol con el ajedrez y las rabonas con los logaritmos.
“Es un partido de Copa...” “Los partidos de Copa son diferentes.” Lo primero es perogrullescamente cierto; lo segundo, también. Porque todos los partidos son diferentes. Pero los dos enunciados, como perogrullescos que son, no sirven para nada. Solamente para los fundamentalistas de las precauciones.
En pocas semanas y en partidos de Copa, primero Estudiantes, después River y el miércoles Vélez dieron vuelta respectivos 0-3, 1-3 y 1-3, convirtiéndolos en 4-3. Para deleite de las tres hinchadas argentinas y para desazón de los apóstoles del 0-0. ¿Cómo es entonces lo de la Copa? ¿Cómo es entonces lo de los partidos supuestamente “diferentes”? Ya no aparecerán quienes digan que los ataques superaron a las defensas, pero seguramente los hombres grises, cueveros de la vida –nunca wines– hablarán y escribirán de distracciones y de precauciones no tomadas.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux