Estaba todo dado para que el debut de Lionel Messi se produjera mañana en el segundo tiempo del encuentro ante Serbia y Montenegro. La idea de Pekerman de llevarlo despacio se mantenía en pie y el talentoso delantero iba a contar con varios minutos de fútbol. Sin embargo, el golpe que sufrió en su pie izquierdo cambió los planes y ahora es probable que Messi se quede con las ganas. Hoy le harán nuevos estudios para determinar la gravedad de la dolencia, aunque en primera instancia no se trata de nada serio, más allá de que le pueda impedir estar ante los serbiomontenegrinos como una medida de precaución.

En la práctica de la tarde en Herzogenaurach, Messi sufrió una molestia que generó preocupación, aunque luego el parte médico llevó un poco de tranquilidad. “Messi sufrió un dolor en su pie izquierdo y está en observación para ver su evolución”, comunicó el médico del equipo, Donato Villani, a través del jefe de prensa de la Selección, Andrés Ventura. “Se retiró del final del entrenamiento. Fue un golpe o una torcedura en el pie izquierdo, no es un esguince porque no es el tobillo. Mañana (por hoy) se verá cómo sigue la situación”, completó el informe médico.

Teniendo en cuenta la cautela con la que el cuerpo técnico sobrellevó la recuperación del desgarro que Messi había sufrido hace tres meses en Barcelona, la lógica indica que al juvenil habría que descartarlo para el encuentro de mañana, independientemente de lo que determinen los estudios a los que lo someterán hoy. La inoportuna dolencia de Messi llegó justo cuando el atacante de Barcelona ya se mostraba ansioso por no tener la chance de ser titular y ni siquiera contar con la posibilidad de actuar algunos minutos, situación que parecía que se iba a revertir mañana en Gelsenkirchen.