La posible llegada de Juan Román Riquelme al Barcelona conmocionó a la ciudad. A pesar de que todavía restan algunos detalles que podrían frenar la negociación, en España dan por segura la operación. Incluso en la tienda deportiva que funciona en el estadio Camp Nou, la camiseta con el nombre del jugador argentino es la más solicitada por los hinchas catalanes y turistas. Por ahora, la única complicación aparente es que Riquelme preferiría que Barcelona compre la totalidad de su pase, mientras que Boca pretende vender sólo la mitad y especular con un buen rendimiento del jugador para que se eleve la cotización del porcentaje restante.
De acuerdo a fuentes vinculadas a la dirigencia de Boca, el monto de la transferencia ya estaría acordado en 13 millones de dólares. De esa cifra, Boca percibirá 6 millones al firmar el convenio y los 7 millones restantes en cuotas hasta finalizar la temporada 2003. Sin embargo, para cerrar la operación, Boca pretende vender la mitad del pase en 6 millones de dólares y aspira a que si Riquelme mantiene un alto rendimiento deportivo, el 50 por ciento restante adquiera un mayor valor en una futura venta. Claro que la idea del jugador es que Barcelona adquiera la totalidad del pase, para ya quedar desligado por completo de Boca. Lo concreto es que a pesar de las diferencias, esas trabas no serían impedimento para que la transferencia se lleve a cabo.
Con el objetivo de finiquitar la transferencia, está previsto que viajen a Buenos Aires el director general del Barcelona, Javier Pérez Farguell, y el asesor letrado, Leopoldo García Hinjos. Los dirigentes catalanes se reunirán con el presidente de Boca, Mauricio Macri, y con los representantes del futbolista, Marcos Franchi y Daniel Bolotnicoff. La intención de los directivos españoles es concretar el pase lo antes posible y poder presentar al crack en Barcelona el martes próximo, en una conferencia de prensa que se efectuará en el estadio Nou Camp.
El contrato del volante con el Barcelona ya fue acordado en España y sólo falta la firma del jugador, que se formalizará tras el arreglo definitivo. Barcelona le pagará 3 millones de euros por año durante cinco temporadas, es decir unos 2.959.000 dólares. Además Riquelme vivirá en uno de los lugares mas exclusivos de la ciudad y dispondrá de una custodia especial, a partir de toda la infraestructura de uno de los clubes más poderosos de Europa.
Mientras se pulen los detalles del que los diarios catalanes llaman “el fichaje del verano”, los hinchas ya se mostraron muy ilusionados con la llegada del volante de Boca. De acuerdo a lo que informó el diario El Mundo Deportivo, en el museo de Barcelona las camisetas “sin número, pero con el nombre del jugador, se venden como rosquillas”. En los últimos días, a partir de la inminente contratación del jugador, las remeras de Riquelme se convirtieron en las más solicitadas, por encima de las actuales estrellas del plante, ya que Riquelme es ídolo pese a que no haber jugado nunca con la blaugrana. Lo que pasa es que los catalanes recuerdan la gran final que jugó –y ganó– Riquelme ante el Real Madrid y una actuación memorable ante el propio Barça en un amistoso. Ahora, la idea es que los fanáticos puedan volver al negocio para estampar sus camisetas con el número que tenga asignado.
La novela parece que termina. Desde que se inició el 29 de marzo del año pasado, cuando Macri informó que el pase se había concretado en 22 millones de dólares, pasaron muchos capítulos. Ahora todo indica que llegó el final feliz.