El Gobierno no interviene

El jefe de Gabinete, Alberto Fernández, señaló que “el Gobierno quiere un espectáculo en paz” en relación al fútbol y que “no interviene” en la continuidad de Julio Grondona al frente de la AFA. “Al Gobierno lo que le preocupa es que el espectáculo deportivo se desarrolle en paz y garantizar la seguridad de los ciudadanos que correctamente quieren ir ver un partido de fútbol”, agregó el funcionario en declaraciones a Radio Continental. Acerca de la conducción de Grondona al frente de la casa del fútbol, puntualizó que “el Gobierno no interviene en esas cosas” y aclaró que en su entrevista con el dirigente, el lunes en la Casa de Gobierno, “de lo único que hablamos fue de que el Estado cumpla su parte y que los dirigentes del deporte hagan la suya”.

De la Rúa se defiende

El ex presidente Fernando de la Rúa, quien en 1985 impulsó desde el Senado la Ley del Deporte, conocida como “Ley De la Rúa”, aseguró que durante su gestión de gobierno, entre 1999 y 2001, “no hubo incidentes en el fútbol”. El ex mandatario, quien en 2001 renunció a su cargo tras una profunda crisis socioeconómica, justificó su afirmación al indicar que en ese entonces “la Policía Federal actuaba eficazmente”, al tiempo que señaló a “los jueces, la AFA, la Policía y al Gobierno” como los responsables de los hechos de violencia ocurridos este año. Según De la Rúa, la ley se promulgó porque había una gran cantidad “de muertes en esa época, como consecuencia de los enfrentamientos entre barrabravas”.

“En Argentina no es nuevo”

Joseph Blatter, el presidente de la FIFA, admitió que no es una sorpresa lo que sucede con el fútbol argentino porque “el tema no es algo nuevo”, y afirmó que “el hecho de que Julio Grondona sea el número dos de la FIFA no creo que nos vincule de ningún modo (con los hechos de violencia). El fútbol es la imagen de nuestra sociedad, en definitiva”. El dirigente suizo sugirió que el fútbol argentino debería modificar sus estructuras para luchar más eficientemente contra el fenómeno de la violencia. “Si hay problemas en los clubes, la federación nacional tiene responsabilidad, porque no existe una liga profesional de clubes en la Argentina, a diferencia de otros países”, destacó. “La AFA tiene suficiente fuerza y experiencia para resolver sus problemas internos.”