El entrenador de San Lorenzo, Ramón Díaz, eligió ayer la cautela para referirse al buen presente de su equipo y aseguró que “para hablar de campeonato todavía falta mucho”. Díaz dijo que le gusta “la determinación y el convencimiento” que tienen algunos de sus dirigidos al referirse a las posibilidades del equipo en el torneo Clausura, pero resaltó que “hay que tener tranquilidad y lo mejor es decir ‘piano piano’”. De esa manera, el riojano salió a bajarles los decibeles a las declaraciones de algunos de los integrantes del plantel, como el defensor Jonathan Bottinelli, quien el lunes pasado, tal vez eufórico por el festejado 43 sobre Independiente, aseveró que “San Lorenzo está para campeón”.

El conductor afirmó que su equipo, líder absoluto del campeonato, “está con muchas ganas, convencido de lo que hace”, a la vez que advirtió que “se vienen compromisos cada vez más exigentes y habrá que asumirlos. El equipo no se puede relajar y estamos trabajando en eso”.

En una conferencia de prensa, el técnico comentó que “con Lanús”, rival de su equipo el próximo domingo, “va a salir un lindo partido. Lanús es un gran equipo, que está bien armado y tiene mucho ritmo por afuera con (Marcos) Aguirre y (Sebastián) Leto”.

Por otro lado, dejó abierta la posibilidad de jugar con tres delanteros frente a Lanús, aunque todo depende del estado en que Ezequiel Lavezzi llegue de sus entrenamientos con el seleccionado argentino. “Los delanteros están todos en un muy buen momento. Tenemos cuatro atacantes bárbaros. (Andrés) Silvera y (Roberto) ‘Malingas’ Jiménez son grandes definidores, mientras que Lavezzi y la ‘Gata’ (Gastón Fernández) tienen habilidad, potencia y picardía. Yo quería tener variantes ofensivas y las tengo”, expresó.

Cuando fue consultado acerca de que el equipo está recibiendo un gran apoyo de parte del público, Díaz indicó: “La gente está motivada. Hay muchos hinchas que volvieron a la cancha con esta campaña y eso es muy bueno”. Respecto de si planea, tal como hizo en River, regalarle una camioneta al plantel en caso de que salgan campeones, respondió con su ya característica sonrisa: “Es algo que estamos analizando, ya lo van a ver”.

En cuanto al entrenamiento, la novedad fue que se reincorporó el peruano Roberto Jiménez, luego de participar del amistoso que su seleccionado perdió 20 ante Japón. Para mañana se espera el retorno del paraguayo Aureliano Torres, ausente también por estar afectado a su seleccionado, a quien Díaz tiene previsto ubicar como titular. Sobre la vuelta de Torres, el técnico señaló: “Nos permitirá reacomodarnos porque atrás tenemos que corregir algunas cositas”.

Por otro lado, el defensor Sebastián Méndez se entrenó con el resto de sus compañeros, ya que se encuentra recuperado de la contractura en el isquiotibial derecho que lo marginó del clásico frente a Independiente.

La mayor parte de la práctica se realizó en el gimnasio debido a la lluvia. Recién en la última media hora el plantel se trasladó a la cancha auxiliar del Nuevo Gasómetro para trotar alrededor de ella. El domingo, San Lorenzo sufrirá las bajas de Tula, quien llegó al límite de amonestaciones, y Hirsig, quien el domingo jugó por el artículo 225 y ahora deberá cumplir su fecha de suspensión ante el regreso de Torres.

Un equipo tentativo para el domingo sería el siguiente: Orión; Alvarado, Méndez, J. Bottinelli, Torres; Rivero, Ledesma, Ferreyra; Fernández; Lavezzi, Silvera.