San Antonio Spurs logró el cuarto título de su historia al derrotar 83-82 a Cleveland en el cuarto partido de la serie final de la NBA, que terminó con una barrida 4-0. Emanuel Ginóbili, que logró su tercer anillo de campeón, fue el goleador del partido con 27 puntos (6-10 dobles, 3-9 triples y 8-11 libres), cinco rebotes y tres asistencias. Fabricio Oberto, que festejó su primer título, logró siete puntos y cinco rebotes. Los dos fueron clave para definir el partido.

Cleveland salió decidido a apostar a su juego exterior, justamente lo que había fallado en el tercer partido y que significó la clave de esa derrota. Y con buenos porcentajes en esa faceta, los locales amagaron con escaparse, sobre todo porque Duncan estaba totalmente ausente en ataque, sin puntos y con cuatro lanzamientos de campo y dos tiros libres fallados. Sin embargo, de la mano de Parker y su velocidad para el contragolpe, los Spurs pudieron limar la diferencia y hasta sacar tres puntos de diferencia luego de dos lindas conversiones de Ginóbili y Oberto. Pero malas decisiones en el cierre del determinaron que Cleveland se fuera en ventaja por un punto al primer descanso (20-19).

Sin embargo, pese a su figura en flojo nivel, San Antonio pasó a tener el comando estratégico del juego, en base a su defensa, que frustró a los Cavaliers. Apenas 14 puntos anotados en el segundo cuarto permitieron que los de Popovich comenzaran a tomar ventajas, liderados en ataque por Parker y Ginóbili, que marcó siete puntos en ese pasaje. Otra vez malas resoluciones en el final del cuarto y los escasos dos puntos de Duncan dejaron el partido con un marcador parejo (39-34), aunque la diferencia real en el juego para los Spurs era mucho mayor.

Del otro lado, LeBron James era el goleador de su equipo, pero sus porcentajes de efectividad eran muy pobres (4-11 dobles, 0-1 triples y 1-4 simples). Entonces, con su mejor hombre maniatado por la defensa, a Cleveland le costó encontrar otra vía de gol confiable. Apenas los rebotes ofensivos de Ilgauskas, que le otorgaban segundas chances a su equipo, servían para que los Cavaliers se mantuvieran cerca en el marcador.

El arranque del tercer cuarto mostró un atisbo de reacción para los locales. Sin embargo, dos triples consecutivos de Ginóbili y Parker llevaron la ventaja de San Antonio a diez puntos. Pero cuando más desmoralizado parecía, Cleveland metió un parcial 12-0 para pasar al frente por tres puntos en el último tramo. Claro que Ginóbili, Duncan y Oberto (cinco puntos seguidos) no querían dejar pasar la chance de celebrar. Entre los tres se cargaron el equipo al hombro y volvieron a dar vuelta el juego. Y desde la línea, Manu se encargó de sellar el partido con cuatro libres.