Para Boca, el domingo finalizó el Apertura y su cabeza ya está metida en el Mundial de Clubes. Luego de un cierre triste, sin triunfos en los últimos tres partidos, la idea de los jugadores y el cuerpo técnico es cambiar la cara para llegar de la mejor manera al máximo objetivo en el arranque de la temporada. Tanto que el entrenador Miguel Russo cuenta con el equipo probable, por más que hay algunos jugadores con dolencias y que todavía faltan diez días para su debut en el certamen ante el ganador del Etoile Sportivo de Túnez y el Pachuca de México.

La mayor preocupación pasa por Neri Cardozo, que se viene recuperando de un esguince en el tobillo izquierdo y ayer trabajó con un vendaje especial en la zona afectada, lo que indicaría que no tendrá problemas para llegar. En tanto, el mediocampista Sebastián Battaglia, por una contractura en el muslo derecho, trabajó en forma diferente durante la práctica. Con todos los futbolistas en plenitud, la probable formación para el primer partido sería con Caranta; Ibarra, Maidana, Paletta, Morel Rodríguez; Ledesma, Battaglia, Banega, Cardozo; Palacio y Palermo.

Hoy y mañana continuarán los ensayos para tener todo listo para la partida, prevista para la tarde de mañana. Y en ese sentido quedó confirmado que Juan Román Riquelme integrará la delegación que viajará a Japón, aunque no podrá ser parte del certamen. Por más que Boca envió una lista original con 22 jugadores con la intención de cubrir la última vacante con su flamante incorporación, la negativa de la FIFA para que Riquelme pueda jugar llevó a que a último momento se sume a Jesús Dátolo, que todavía no tiene garantizado su lugar. Ayer, los jugadores retiraron los bolsos con la indumentaria oficial que usarán en Japón y, como el ex Banfield recibió el suyo, todo indica que viajará.