Con la presencia de su flamante técnico, Carlos Ischia, Boca inició ayer sus trabajos de pretemporada, aunque la novedad más importante no estuvo en el campo de entrenamiento sino en el consultorio médico, donde Lucas Castromán estuvo para someterse a la revisación. El ex jugador de Vélez ya tiene todo acordado para sumarse a préstamo a cambio de 700 mil dólares por un año, por lo que si no sucede nada extraño, viajará mañana a Tandil con sus nuevos compañeros para llevar a cabo la parte fuerte de la pretemporada.

“Esfuerzo y concentración.” Esas fueron las palabras que les remarcó Ischia a sus jugadores en la primera charla formal que mantuvo con el grupo. Allí dejó en claro que el objetivo principal del semestre será la Copa Libertadores, donde Boca debe defender el título que logró el año pasado para poder regresar a Japón para disputar el Mundial de Clubes. Luego, ya con los preparadores físicos Juan Manuel Alfano y Diego Rousse, comenzaron los trabajos específicos. Por la tarde, los futbolistas volvieron a realizar tareas físicas, rutina que se repetirá hoy. En cambio, mañana ya viajarán hacia Tandil, sitio en el que trabajarán hasta el 28 de enero. Además del plantel profesional, también viajará un grupo de juveniles a cargo de Abel Alves, aunque no se alojará con el resto de los futbolistas.

Jonathan Maidana, uno de los jugadores que hablaron tras la primera práctica, explicó las premisas que planteó Ischia. “Con la llegada de un nuevo técnico, las expectativas se renuevan, comienza un nuevo ciclo. Así que él nos habló muy tranquilo, y nos dijo que esto es Boca y, por lo tanto, hay que ser protagonistas siempre”, señaló el defensor, que no se mostró preocupado por la posible llegada del paraguayo Julio César Cáceres, el refuerzo que puede llegar a Boca para su puesto.

Otro de los que se mostraron contentos con la llegada del nuevo técnico fue el uruguayo Alvaro González. “Todos mis compañeros hablan de Ischia como de una buena persona y de un gran entrenador. Y no tengo ninguna duda de que así es, ya que por algo está en Boca”, comentó el mediocampista, entusiasmado con la nueva etapa. “Siempre que hay un cambio de entrenador, todo arranca de cero y se generan nuevas expectativas. Cada uno tiene que tratar de hacer lo mejor para que el técnico, a la hora de armar el equipo, te mande a la cancha”, indicó González.