La pretemporada de Independiente sigue dando que hablar. En el primer día de entrenamiento, un perro mordió al goleador, Germán Denis, y ayer un taxi chocó a su compañero de ataque, Ismael Sosa, cuando retornaba de la playa, tras la práctica matutina. “Dobló a alta velocidad y me llevó puesto con el espejo retrovisor”, dijo Sosa, que recibió diez puntos de sutura en el brazo pero podrá jugar esta noche.