Los 46 puntos que recibió Argentina ante Senegal constituyen la marca más baja recibida por un equipo en lo que va del Mundial. Hace falta remontarse 64 años para encontrar una anotación más baja recibida por un conjunto nacional en este tipo de torneos. Eso a pesar de que la defensa del conjunto de Julio Lamas no tenía hasta hoy buenas estadísticas.

En lo que va del Mundial, ningún equipo había permitido menos de 50 puntos. En ese sentido, lo mejor habían sido los 50 tantos que Brasil recibió en su victoria 79-50 sobre Irán, seguidos por los 54 que Egipto le pudo anotar a España. Argentina pulverizó esa marca, con porcentajes de acierto de los senegaleses que causan asombro por lo bajos que fueron: ocho por ciento en triples (11-2) y 40 en dobles (17-43) para un pobrísimo 33 por ciento en tiros de campo.

Nunca antes un equipo argentino había conseguido semejante eficacia defensiva, salvo en el primer Mundial disputado en 1950 en Buenos Aires, en la prehistoria del básquetbol, con otras reglas que generaban anotaciones mucho más escasas. En aquel certamen, sólo en la final ante Estados Unidos, recibió más puntos que ayer, ya que se impuso 64-50. En cambio, los otros cinco partidos son los únicos de su historia mundialista con menos puntos en contra que ante Senegal.

El equipo de Lamas no se había caracterizado durante el Mundial por su buena defensa. Croacia le anotó 90 puntos, Filipinas le convirtió 81 y Puerto Rico le marcó 75 para un promedio general de 82. Gracias a su partido ante Senegal, esa marca ahora se redujo a 72.