Mientras en Italia se discute si el Estado debe auxiliar a los clubes que se encuentren al borde de la quiebra, en Inglaterra son los propios hinchas los que se proponen rescatar a sus equipos.
Los aficionados del Leeds United, penúltimo clasificado de la Premier League inglesa y con serio riesgo de descender al cabo de la presente temporada, pretenden recaudar 15 millones de euros para comprar la entidad.
La propuesta surgió al sopesar la afición la posibilidad de que el club, que atraviesa una delicada situación económica, pasara a ser gestionado por una junta directiva designada por el gobierno, como paso previo a la quiebra y posterior liquidación.
“¿Qué mejor arrendatario que los seguidores del Leeds United?”, comentó John Boocock, el portavoz de la Asociación de Aficionados de este equipo del norte de Inglaterra. La entidad tiene un programa de asistencia social para chicos carenciados que es modelo en el fútbol de ese país.