José Luis Corbo, representante de Rampla Juniors, fue elegido como nuevo titular de la AUF en una alianza que llevaron a cabo las entidades más chicas del fútbol del Uruguay como Wanderers, Defensor, River, Liverpool, Bella Vista, Rocha y Danubio, con independencia de los grandes Peñarol y Nacional, cuyas dirigencias se mantuvieron en un segundo plano. Corbo es miembro del gobernante Frente Amplio y desde su asunción anunció que llamará a una nueva licitación si Tenfield no mejora su oferta. Paco Casal, en cambio, amenazó con recurrir a la Justicia y a la FIFA, ya que para él la AUF es la que firmó el contrato y debe resarcirlo a él si pretende cancelarlo. “Vos tenés que ir y poner la cara. Decí que firmaste y hacete cargo de eso donde sea, en la Justicia o donde mejor te parezca. Yo en la AUF no pongo un peso más”, le habría dicho Casal a Figueredo durante una reunión que ambos mantuvieron días atrás en Punta del Este, según la prensa uruguaya, lo que probaría que las relaciones entre ambos no quedaron en buenos términos tras la renuncia del dirigente. Pero, cualquiera sea el final de esta historia, está claro que, en la otra orilla del Río de la Plata, “todo pasa” es una frase que algunos ya no pueden pronunciar con tanta facilidad.