“Un desastre.” “Le quita la esencia al tenis.” “Da lugar a especulaciones.” El sistema round-robin recién está dando sus primeros pasos dentro del circuito, pero varios jugadores, con críticas lapidarias, ya optaron por sepultarlo. El formato de grupos que implementó la Copa Telmex para su séptima edición encendió la polémica y despertó una ola de malestar en la mayoría de los tenistas que integran la Legión. “El sistema es un desastre. Tiene que ser como siempre: el que gana se queda, el que pierde se va. Encima, en mi caso, tuve que jugar un partido más y eso no me gustó para nada”, remarcó Guillermo Cañas.

El objetivo de la ATP fue claro: permitirles a los torneos más chicos, que habitualmente dependen de un par de figuras, contar con los mejores jugadores por, al menos, dos partidos. El Abierto de Buenos Aires es el tercer torneo de la temporada en donde se implementa (tras Adelaida y Viña del Mar), pero también está confirmado que se utilizará en Las Vegas, Estoril, Londres, Gstaad, Newport, Indianápolis, Umag, Washington y Estocolmo. “Creo que da margen para las especulaciones. El único torneo que jugué con este sistema fue el Masters y espero que sea el único que mantenga el formato de grupos”, señaló el español Carlos Moyá.

Otro de los jugadores que dispararon contra el sistema fue el cordobés Agustín Calleri. “No me gusta para nada. Le quita la esencia al tenis. El que pierde se va. Sólo se tiene que jugar así en el Masters”. Se ve que el cordobés tomó muy en serio sus palabras, ya que ayer no se presentó a jugar su segundo partido, después de caer en el debut ante Albert Montañes. “Por suerte salí adelantado, pero si hubiera jugado la fase previa no me habría gustado nada. Ahí el sistema es un poco injusto. Porque es round-robin sólo para los mejores rankeados”, puntualizó Sergio Roitman, uno de los invitados especiales del torneo.

David Nalbandian, máximo preclasificado del torneo, optó por darle un tiempo de prueba al nuevo sistema, aunque adelantó que es difícil que prospere y se consolide en los grandes torneos. “Todavía es algo nuevo. Tiene que pasar un tiempo para poder analizarlo. En mi caso, perdí y tuve otra chance. Pero no creo que pueda implementarse en los grandes torneos”, sostuvo el unquillense. “Como todo cambio es resistido, sobre todos por los que les fue bien con el viejo sistema. La ATP nos pidió que tuviéramos paciencia. Mientras que le guste a la gente, el cambio va a ser productivo”, recalcó Martín Vassallo Argüello.

Quien se paró de la vereda de enfrente fue Luis Horna. Y no es para menos. El peruano viene de ganar el torneo de Viña del Mar, bajó en su debut a Nalbandian y está invicto en lo que va del año. “¿Cómo no me va a gustar el round robin? Desde que lo jugué estoy invicto”, recordó.

“Necesitamos un cambio. Si queremos más ingresos, ser más famosos y que este deporte sea más popular tenemos que aceptar algún cambio. El tenis necesita un cambio y si ese cambio es el round-robin bienvenido sea. No va a cambiar la leyenda del tenis por eso. La tele y el público son los que mandan”, aseguró Horna.