ECONOMíA
› METROPOLITANO INAUGURARA LA ELECTRIFICACION DEL RAMAL GLEW-KORN
Apurar el ahorro del costo del diesel
› Por Cledis Candelaresi
Impedidas, por ahora, de aumentar el boleto y con un subsidio estatal que consideran insuficiente, las adjudicatarias de trenes urbanos encontraron una veta para paliar el daño que le produjo la devaluación y hasta para sacar rédito de ella. Metropolitano, operadora de las líneas Roca, San Martín y Belgrano Sur, inaugurará en días la electrificación del ramal Glew-Alejandro Korn y pronto reforzará su flota con nuevos coches de diseño “antivandálico”, especialmente concebido para evitar el robo de partes y accesorios de los vagones (ver aparte). Ambos esfuerzos de inversión tienen como contracara ventajas contundentes. El reemplazo de las formaciones diesel le permitirá gastar menos en combustible, que aumentó más de un ciento por ciento desde comienzos del año. Ahorro similar al que le permitirá el reemplazo de accesorios seductores para los ladrones por otros que, en su mayoría, impactan menos en los costos.
En este sentido, Metropolitano podría ser un caso testigo, con problemas y chances comunes a los otros operadores ferroviarios. En principio, cualquiera de ellas puede decidir qué inversiones hacer y cuáles no, por el simple hecho de que estas concesiones hoy no tienen un contrato firme. El original, firmado hace alrededor de diez años, fue reemplazado por una addenda, producto de una objetada renegociación durante el gobierno de Carlos Menem. Luego de una prolongada batalla judicial, los concesionarios consiguieron que esos acuerdos quedaran firmes, aunque nunca llegaron a aplicarse: ni se aumentaron las tarifas entre el 70 y el 100 por ciento, como se preveía, ni se ejecutaron en los términos previstos las obras a costear con ese incremento tarifario.
Hoy cada grupo invierte en el mantenimiento imprescindible para sostener el servicio y para cumplir con las exigencias de las aseguradoras contratadas, pero no hay ningún instrumento legal firme que permita al Estado exigir obras puntuales. En este contexto, Metropolitano electrificó el ramal Glew-Alejandro Korn, con 5 millones de pesos provenientes de un aporte de capital. La inauguración, prevista para el año próximo, fue adelantada al jueves 26 para apurar el ahorro de costos: es más barata la alimentación de los trenes eléctricos, los que, a su vez, por el sistema centralizado de cierre de puertas, permiten controlar mejor a los sin boleto.
La evasión es, precisamente, una de las causas del derrumbe en los ingresos de Metropolitano, que retrocedieron desde los 14 millones de pesos-dólares anuales en agosto del 2001 a los 8 millones de pesos actuales, según se lamenta el presidente de la empresa, Mario Montoto. Sin embargo, la verdadera razón de esta caída es el aumento de la desocupación, que hizo que muchos trabajadores dejaran de viajar. Desde hace unos meses el Estado resucitó los subsidios: esas líneas cobran parte de un fondo que se nutre con un impuesto específico sobre el gasoil, cuyo precio creciente permite recaudar cada vez más.