El flamante director de Lechería, Luciano Di Tella, se reunió ayer con los representantes de la cadena láctea para seguir negociando un nuevo acuerdo sectorial. Los tamberos reclaman públicamente mejores precios y la industria, una baja de la retención para la leche en polvo exportada, pero como el Gobierno les manifestó que no está dispuesto a ceder frente a sus exigencias acordaron informalmente mantener el esquema actual por otros treinta días y tratar de optimizar el esquema de compensaciones. Los productores pidieron que fuera directamente la Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario la encargada de pagar los subsidios, porque afirman que la industria les gira menos de lo que debería. La industria, por su parte, afirma que desde principio de año el Gobierno no liquida las compensaciones que le corresponden. Para tratar de normalizar esa situación hoy se reunirán con el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno.

La reunión que mantuvieron ayer en la Secretaría de Agricultura se extendió durante cuatro horas y fue encabezada por Di Tella, porque el secretario Carlos Cheppi se encontraba de viaje en Chile. Al término del encuentro, el director de Lechería se limitó a señalar que el precio de 1,05 peso por litro (que incluye un subsidio de $ 0,10) “es rentable” para la gran mayoría de los tambos y lo justificó difundiendo los datos de un estudio realizado por el INTA y la Comisión Federal de Inversiones (CFI) en torno de la estructura de costos y producción del sector. El dato que surge de allí es que el 89 por ciento de los tambos del país tiene rentabilidad. “No se puede subir el precio de la leche para una cuenca lechera y para otra no: el 89 por ciento sobre 10 mil tambos está bien y debemos impulsar herramientas para mejorar la escala de rentabilidad de las pequeñas producciones”, remarcó. El funcionario expresó que actualmente hay 30 cuencas lecheras, con diferencias en todas ellas de tambos pequeños, medianos y grandes, y allí “hay 1000 tambos con graves problemas: ya que con su esquema de costos no son viables”. A instancias del informe oficial, aclaró que los tambos con problemas están concentrados en las cuencas de Entre Ríos, Abasto Sur y Norte, y la de Villa María.

Claudio Ersinger, de la Cámara de Productores de Leche de Buenos Aires, afirmó, por su parte, que “no hubo definiciones políticas” y destacó que “no hemos acordado absolutamente nada”. El tambero bonaerense sostuvo que la banda de precios que presentó y defiende la Secretaría de Agricultura, con valores por litro que van desde los 0,80 a 1,20 peso, “está lejos de lo que el productor pretende”. “Esperamos que la semana que viene haya soluciones”, agregó Julio César Aimar, de la Mesa Nacional de Productores de Leche.