El sector metalúrgico llegó a un acuerdo salarial después de cinco meses de difíciles negociaciones. La Unión Obrera Metalúrgica y las seis cámaras del sector, lideradas por Adimra, firmaron ayer el convenio para una mejora de haberes que combina una suma fija no remunerativa de 1350 pesos en cuatro cuotas para el primer semestre, y un incremento del 18 por ciento en tres partes a partir de octubre. La propuesta elevada por el Ministerio de Trabajo que puso fin a la dura negociación se terminó de aceitar en la última semana. El titular del sindicato, Antonio Caló, sostuvo que el incremento que beneficia a alrededor de 220 mil trabajadores asciende hasta el 21,5 por ciento porque contabiliza como parte del acuerdo un ajuste de la escala salarial de las distintas ramas proveniente de la paritaria de 2008. Concluyeron así las principales negociaciones salariales del primer semestre.

Al principio de las discusiones, los empresarios argumentaban que no podían dar aumentos por la caída en el nivel de actividad tanto interna como externa. Sus ofertas informales llegaban al 12 por ciento, mientras que la UOM reclamaba el 22 por ciento. “No fue lo ideal, pero fue lo mejor que se pudo conseguir”, apuntó Caló. La sensación fue similar en la dirigencia empresaria: “La negociación nos dejó cierto sabor amargo, nunca quedamos satisfechos”, admitió Ricardo Güel, director ejecutivo de Adimra.

A fines de junio, ante la prolongación de la discusión, el Ministerio de Trabajo intimó a la dirigencia empresaria, en base a las propuestas existentes, a pagar 500 pesos no remunerativos por única vez a cuenta de futuros aumentos. Esa suma corresponde a la primera cuota de los 1350 pesos que no formarán parte del salario básico. Después de dos paros –uno terminó con incidentes en las puertas de la cartera laboral–, el Gobierno comenzó a consensuar entre las partes una propuesta que terminó firmándose ayer.

La próxima cuota no remunerativa será de 350 pesos a pagar con los haberes de la primera quincena de agosto, y las últimas dos partes de 250 pesos cada una en septiembre. La mejora comenzará a regir a partir de octubre. Allí se incorporará al salario el 12 por ciento, en diciembre un 3 por ciento más y el restante 3 en febrero. Así, el salario básico de los operarios, la categoría inferior, pasará de 8 pesos la hora a 9,44 pesos en los primeros meses de 2010.

La posición de la patronal fue dura hasta el final, cuando buscó exceptuar de las mejoras a los trabajadores que están dentro del Programa de Recuperación Productiva (Repro). No lo lograron, pero sí consiguieron que figure una mención a “la situación crítica por la que atraviesa” el sector. Además, el documento plantea la necesidad de que “el Repro se extienda a quienes lo soliciten de aquí en adelante”. De los más de 90 mil trabajadores que están en el programa, alrededor de 18 mil son metalúrgicos.