ECONOMíA › MEDIA SANCION A LA REFORMA IMPOSITIVA BONAERENSE. QUEJA RURAL
El gobierno de Scioli logró media sanción para la reforma que grava con más impuesto a los inmuebles rurales de mayor valuación. A la descontada queja de la Mesa, se sumó la de la oposición. Los movimientos portuarios, con nuevo tributo.
La Cámara de Diputados bonaerense le dio media sanción al paquete de reformas impositivas enviado por el Ejecutivo provincial y desató una reacción a coro de opositores y dirigentes agropecuarios. Los cambios al sistema impositivo, que contemplan una sustancial suba en el impuesto rural, fueron criticados por quienes cuestionan que el gobernador Daniel Scioli no reclame, al mismo tiempo, los fondos adeudados por el gobierno nacional en materia de coparticipación. Margarita Stolbizer, diputada electa, opinó que “no es aconsejable meter mano en el bolsillo de la gente en el actual contexto”. La Mesa Agropecuaria provincial amenazó con medidas de fuerza y el cobismo provincial decidió separar del bloque a su presidente por haber posibilitado el quórum con su presencia.
El paquete de la reforma impositiva en la provincia incluye, entre otras medidas, un aumento promedio de 25 por ciento en el tributo Inmobiliario Rural. Además, incrementa el gravamen a las edificaciones radicadas en el campo y otorga exenciones fiscales para quienes se encuentren en emergencia agropecuaria.
El ministro de Asuntos Agrarios, Ariel Franetovich, opinó que “hay que sincerar todo el sistema impositivo para empezar a aproximar las valuaciones fiscales a la realidad”. Explicó que el impuesto Inmobiliario Rural, “en la zona del sudoeste y del este bonaerense, bajó a cero” y que “según la productividad”, las valuaciones fiscales se van modificando. Sostuvo que “sincerar el sistema tributario, no en lo recaudatorio sino actualizando lo que hace rato no se actualiza, significa empezar a aproximar las valuaciones fiscales a la realidad”.
El impuesto Inmobiliario Rural, según el funcionario, “no tiene incidencia en la productividad”. Y advirtió que hay que tener en cuenta que las nuevas tasas empiezan a regir “recién a partir del 1º de enero (próximo), y la primera cuota se pagaría en febrero, cuando algunos ya han cosechado el trigo y otros estén por cosechar la soja”.
Margarita Stolbizer, diputada electa por la Coalición Cívica, se mostró absolutamente disconforme con la suba y creación de impuestos para cubrir el déficit fiscal provincial. “Le reclamamos que vaya a golpear la puerta que tiene que golpear y no la de los contribuyentes, con el complejo contexto social actual”, se quejó. “Yo le ofrecí personalmente que encaráramos acciones conjuntas, no sólo en demanda de la coparticipación, sino por el impuesto al cheque, pero sin embargo nada hace el gobernador que pueda molestar al gobierno central”, agregó, estimando en 12 mil millones de pesos la deuda de la administración nacional con el gobierno provincial.
La Concertación Federal, alineada en el cobismo, anunció que el titular de la bancada, Patricio López Mancinelli, fue separado del bloque “por permitir que el oficialismo lograra el quórum necesario para tratar el proyecto de Reforma Impositiva”, al que el sector se oponía. El denominado cobismo, vale recordar, surge tras el voto de desempate del vicepresidente Julio Cobos en contra de las retenciones móviles a las exportaciones agrícolas, el proyecto impulsado por el Frente con el que llegó al gobierno y a la Cámara alta. La Coalición Cívica-ARI consideró “vergonzoso que un diputado de Cobos haya permitido sancionar el impuestazo de Scioli”.
En similar sentido se pronunció la Mesa Agropecuaria provincial, versión local de la Comisión de Enlace. “El gobierno provincial, como consecuencia de su incapacidad para exigir lo que le corresponde por coparticipación, sigue experimentando y poniendo en grave riesgo la actividad económica”, alertó en un comunicado.
El proyecto con media sanción incluye un aumento del Impuesto Inmobiliario Rural, la creación de un gravamen al movimiento de mercaderías importadas y exportadas a través de los puertos bonaerenses, un tributo a la transmisión gratuita de bienes y un aumento del Impuesto a los Ingresos Brutos. Con respecto al tributo al movimiento de cargas y descargas en puertos, la Mesa Agropecuaria lo consideró como “una imposición que termina siendo otra retención encubierta, que recaerá mayoritariamente sobre los productores agropecuarios”.
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