El Banco Central intervino ayer fuerte en la plaza cambiaria, comprando dólares, lo que permitió sumar reservas a pesar de haber pagado 28 millones al Banco Interamericano de Desarrollo (ver aparte). El stock se ubicó en 47.778 millones de dólares, 38 millones por encima del cierre de la víspera. En tanto, la divisa estadounidense se mantuvo anclada en los mismos valores. Al público, las pizarras del microcentro lo ofrecieron a 3,88 pesos.

Según relataron algunos cambistas, comienzan a aparecer los exportadores de granos volcando dólares en la plaza y el Central aprovecha para absorber el exceso de oferta. Estimaciones del mercado coinciden en que la entidad monetaria compró entre 60 y 70 millones de dólares.

En la Bolsa porteña los activos detuvieron la escalada de precios con que celebraron la decisión oficial de asegurar el pago de vencimientos de deuda de este año. Ayer la presidenta Cristina Fernández reiteró que, pese a todo, va a cumplir con esos compromisos financieros.

Los títulos públicos arrojaron resultados dispares. El Descuento en dólares con ley de Nueva York retrocedió 1,2 por ciento, el Par en pesos perdió 1,5 por ciento. En cambio, el Par moneda estadounidense con legislación local subió 1,7 por ciento, el cupón PIB en pesos avanzó 1,6 por ciento y en dólares con ley argentina repuntó 1,6 por ciento.

Las acciones bancarias replicaron ese comportamiento, debido a las tenencias de bonos en sus portafolios, y condujeron a una leve caída del índice Merval. El panel se retrajo apenas 0,3 por ciento con un volumen de negocios que alcanzó a 53 millones de pesos. Más allá de este promedio, el Banco Hipotecario cayó 2,3 por ciento; el Francés, 2,2; el Grupo Financiero Galicia, 1,7; el Macro, 1,4, y el Patagonia, el 0,25 por ciento.

La depreciación de los activos locales se extendió a los granos. La soja perdió 4,30 dólares, a 219,7 la tonelada en el Mercado a Término de Buenos Aires, frente a la recuperación de la divisa estadounidense.