La actividad industrial continúa su ritmo ascendente. En marzo, el crecimiento fue de 11,1 por ciento y el acumulado del primer trimestre cerró con un alza de 9,2, según informó ayer el Indec. En lo que va del año, los sectores manufactureros que van a la delantera en la recuperación son el automotor, siderúrgico, textil y productos de caucho y plástico. El aumento responde en buena medida a una recomposición respecto de las caídas industriales en el mismo período de 2009, cuando la crisis se sintió con más fuerza. Uno de los pocos rubros que en forma interanual disminuyó su producción es la industria alimentaria, en particular el grupo de las carnes rojas.

Al analizar el comportamiento industrial en el margen, el fuerte crecimiento se atenúa. Frente a febrero de este año, la medición muestra un aumento de 0,1 por ciento y frente al cuarto trimestre de 2009 la variación es negativa en 0,5 por ciento. A partir de estos datos, se evidencia un proceso de recuperación más lento que el que marcan los índices que efectúan la comparación interanual. Entre los especialistas se espera que a mediados de año se pueda alcanzar los niveles de producción de los mejores meses de 2008. El desempeño industrial fue anticipado por la presidenta Cristina Fernández, aunque apeló a la medición con estacionalidad, que registró un avance de 10,6.

La industria automotriz es una de las que impulsan el avance. En forma interanual creció 38,2 por ciento, explicado en buena parte por la demanda externa, especialmente de Brasil. Según datos de Adefa, el crecimiento de las exportaciones fue de 41,2 por ciento.

En marzo, el segmento industrial que más subió fue la siderurgia, con un avance interanual de 52,9 por ciento. Se destaca la producción de acero, que subió un 74,6. Según el último informe del Centro de Industriales Siderúrgicos (CIS), este crecimiento se explica por la “tracción” proveniente de la industria automotriz, siendo también importante el avance en la construcción y la metalmecánica, aunque esta última sigue sin recuperarse definitivamente respecto del año pasado.

Otro “efecto multiplicador” de la industria automotriz se visualiza en la producción de neumáticos, que subió un 18 por ciento en el acumulado del año. En tanto, la industria de los minerales no metálicos, proveedora de materiales de la construcción, muestra una recuperación más lenta, creciendo 6,1 respecto de marzo de 2009.

El desempeño opuesto lo muestra la industria alimentaria. El total del bloque registra una caída del 2 por ciento en marzo respecto al mismo mes de 2009, y en lo que va del año la baja llega al 3,5 por ciento. La merma está explicada por sectores clave como la carne y los cultivos más importantes. En el último caso, el fenómeno tendría una carga estacional y residual de la sequía, puesto que se espera que próximamente comience a impactar en mayor medida la buena campaña actual. También se suma a las caídas la industria láctea, con el 8,4 interanual.

El caso de mayor relevancia, por el contexto de evidente escasez en la oferta y fuerte suba de precios son las carnes rojas, que cayeron 14,7 por ciento interanual. Frente a febrero pasado la baja llega al 18,9 y en lo que va del año la merma es del 8 por ciento. Es el reflejo de la fuerte liquidación del stock ganadero que se produjo el año pasado. El retroceso en este proceso de liquidación, motivado por distintas causas, como la mejora climática que aumentó las pasturas, la propia merma en el stock, la perspectiva de mejores precios o el cierre ad hoc de las exportaciones, explica la caída en la producción en el sector en marzo.

La industria liviana también está evidenciando la recuperación. El sector textil creció en la comparación anual un 31,3 por ciento, papel y cartón lo hizo en 6,4 y edición e impresión, 7,4. La política oficial de comercio administrado, controlando las importaciones de los países asiáticos, influye para lograr el resultado.

Las pymes del sector apoyan las medidas protectoras, lo que se reflejó en el conflicto comercial con China. Uno de los beneficiados es el sector de juguetes. En este sentido, el titular de la Cámara Argentina de la Industria del Juguete, Miguel Faraoni, destacó que la participación de la producción nacional en el mercado local el año pasado fue de entre el 35 y el 40 por ciento, cuando a principios de la década era sólo del 17. En la exposición anual del sector, la ministra de Industria, Débora Giorgi, resaltó el “impacto positivo en el empleo de las políticas de incentivo al consumo y de resguardo de la producción nacional”.