Los trabajadores de la carne negaron que vayan a respaldar el lockout dispuesto por la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), apoyado por la Mesa de Enlace, para la jornada de hoy y mañana. Lo confirmó, junto a otros dirigentes gremiales, José Alberto Fantini, secretario general de la Federación Gremial del Personal de la Industria de la Carne, entidad que dice representar a cerca del 80 por ciento de los trabajadores del sector. Explican que las patronales del agro utilizaron la figura del ex secretario general del Sindicato de la Carne de Buenos Aires (Sigcba), Silvio Etchehún, para “confundir a los medios y a la opinión pública” con un supuesto apoyo de los trabajadores del sector. En cambio, aseguran que en ningún momento hubo contacto con la Mesa de Enlace.

“No permitiremos que la Mesa de Enlace nos use para una marcha totalmente política. Que quede claro, en la movilización no habrá trabajadores de la carne, ya que ninguna de las organizaciones legítimamente constituidas adhieren. Que reclamen por sus intereses, no por los nuestros”, afirmó Fantini a través de un comunicado.

El paro de comercialización de hacienda en pie y faena y la movilización hacia la Plaza de Mayo fue convocado por Carbap el jueves pasado, en reclamo por el cierre de las exportaciones de carne. En la reunión donde se decidió este nuevo lockout participó Etchehún, cercano al gastronómico Luis Barrionuevo, titular de la CGT Azul y Blanca, que está enfrentado a la conducción de Hugo Moyano, a quien responde Fantini.

Etchehún concurrió al convite en nombre de los trabajadores de la carne, pero en realidad tiene una representatividad muy escasa. De hecho, fue desplazado de Sigcba a fines de 2008, tras haber sido cuestionado por graves irregularidades. El gremio fue intervenido por la federación que encabeza Fantini, a quien se le recriminan sus lazos con las patronales frigoríficas. La disputa por la conducción de Sigcba llegó al Ministerio de Trabajo y se resolvió justamente un día después de la aparición de Etchehún con Carbap. La cartera que encabeza Carlos Tomada lo intimó a que “deponga su cargo en forma definitiva y terminante”.

“Lamentamos que algunas personas, que se presentan ante la sociedad como dirigentes de la carne, intenten utilizar algunas complicaciones que hay hoy en la industria para obtener algún beneficio personal”, indicó Fantini. “Etchehún no es representante de un solo trabajador, es sólo un opinador mediático, funcional ahora a la Mesa de Enlace”, disparó. La federación que encabeza Fantini, según sus propias cifras, representa a unos 60 mil trabajadores, cerca del 80 por ciento del total.

En la misma línea se manifestó el secretario general del Sindicato de la Carne de Capital Federal, Segundo Molina. Aseguró que “en Buenos Aires, como en el resto del país, el jueves y el viernes los frigoríficos funcionarán normalmente”. De forma parecida lo hizo el titular del sindicato de obreros curtidores (SOC), Walter Correa. “No estaremos en la marcha en la cual no estarán los trabajadores, sino los empresarios del campo junto a falsos dirigentes”, descargó.

Más allá de la no adhesión al reclamo patronal, los trabajadores de los frigoríficos quedaron en una situación complicada después de las restricciones a las exportaciones de carne dispuestas por el Gobierno. De hecho, la semana pasada, luego de una importante movilización obrera frente a la cartera laboral, las cámaras empresarias, autoridades gremiales y del Ministerio negociaron un jornal mínimo de 200 horas de trabajo mensuales, que deberán respetarse para evitar nuevas protestas.