El ministro de Economía, Amado Boudou, anunció ayer que se prorrogará por quince días, hasta el 21 de junio, el plazo para adherir al canje de deuda. El funcionario justificó la decisión en una solicitud recibida de parte del órgano regulador del mercado italiano y de la asociación de bancos de ese país. Luego del limitado margen de aceptación que recibió la operación con los grandes inversores, que sumaron un 45 por ciento, la apuesta es captar la mayor cantidad de tenedores individuales para alcanzar el objetivo del 60 por ciento. Boudou evitó dar precisiones acerca de si hubo una promesa de un fuerte ingreso de parte de bonistas italianos en el canje que sustente la prórroga. “Es una decisión que no tiene costo y que por todos lados genera un beneficio”, explicó a Página/12. Según adelantó, hasta el momento se obtuvo una adhesión del 50 por ciento y están recibiendo registros de entre 180 y 200 millones diarios de adhesión a la operación.

“Estamos atendiendo a un pedido de la ABI (Asociación de Bancos Italianos), que pidió, por nota al gobierno argentino, que se extienda el cierre, porque al ser banca minorista se les está haciendo un trabajo más pesado recibir los pedidos”, argumentó Boudou en Casa de Gobierno, luego de anunciar el Programa de Financiamiento Productivo del Bicentenario (ver aparte). La entidad que nuclea a los bancos italianos solicitó “dos semanas más de plazo”. “Por su parte, la Consob (organismo de regulación bursátil de Italia) se hizo eco de la solicitud y por lo tanto vamos a estar otorgando dos semanas de plazo extra”, detalló. El cierre del canje será entonces el 21 de junio próximo, en vez del 7, como estaba previsto en un principio.

Durante la primera etapa del canje, destinada a inversores institucionales, la operación obtuvo una adhesión del 45 por ciento, unos 8500 millones de dólares. De esta manera, para alcanzar la meta prevista, Economía deberá conseguir el otro 15 por ciento con los minoristas. Llegar a ese porcentaje requiere del ingreso de 3000 millones de dólares en manos de tenedores individuales. La Secretaría de Finanzas estima que existen entre 3000 y 5000 millones de dólares en poder de los minoristas. La mayoría de estos inversores se encuentra en Italia. La Task Force Argentina dice representar a 180 mil bonistas, con 4300 millones de dólares en títulos en default.

El ministro reiteró que los grandes fondos que esperaban que ingresaran lo hicieron. “Lo que recibimos del monto mayorista es lo que llegó. Nunca esperé que Dart y Elliot entraran”, dijo a Página/12.

–¿Por qué cree que quedaron afuera algunos fondos de la lista que los bancos organizadores (Barclays, Deutsche y Citi) le presentaron? –preguntó este diario.

–La propuesta de ellos incluía el pago de cupones de PBI atrasados y de todos los intereses. Nosotros se la fuimos cambiando. El 60 por ciento de lo que recibió un acreedor de la Argentina desde 2003 a hoy fue por cupones de PBI. Recibió más incluso que por capital –explicó el ministro.

Boudou adelantó que la operación se encuentra actualmente “en torno del 50 por ciento” de aceptación y que en los últimos días se verifica una registración promedio de adhesión “de entre 180 y 200 mil dólares diarios”. No obstante, evitó precisar desde cuándo se exhibe este promedio, lo que permitiría estimar lo ingresado por minoristas hasta el momento. “Lo que nos sorprende es que se haga a diario y no, como era de esperar, todos juntos a último momento”, explicó. El funcionario descartó que se extienda más la operación. “La podríamos tener abierta hasta fin de año, pero queremos que se termine este capítulo”, señaló.

Por último, al ser consultado sobre si se llegará al 60 por ciento de adhesión, manifestó: “Por ahí hay una sorpresa”.