China empezó a comprar porotos de la oleaginosa luego de su decisión de frenar las importaciones de aceite por cuestiones sanitarias. Los envíos de esta materia prima hacia al país oriental alcanzaron los 4,8 millones de toneladas en los primeros siete meses del año. Más allá de que las relaciones comerciales con China continúan estables, “el boicot al aceite de soja provocó una pérdida de valor agregado en la cadena productiva de esta oleaginosa”, afirmó Dante Sica, titular de la consultora Abeceb.com. Sin embargo, las menores compras de China fueron absorbidas por India, que aumentó su participación en las compras de aceite en más de un 100 por ciento.

La decisión del gobierno chino provocó una caída del 89 por ciento en las exportaciones de aceite hacia ese país, lo que implicó un volumen de 1,2 millón de toneladas menos. Sin embargo, durante el mismo período hubo un incremento de las ventas del poroto de soja. “El valor por tonelada vendida de aceite de soja es un 56 por ciento mayor, lo cual produce una pérdida de valor agregado en las exportaciones (con China)”, señaló la consultora Abeceb.

Durante los primeros siete meses, las exportaciones totales de aceite de soja alcanzaron un valor de 2142 millones de dólares, tras venderse casi tres millones de toneladas. En este sentido, lo que dejó de comprar China lo pasó a importar India, país que aumentó un 140,4 por ciento las toneladas demandadas en los primeros siete meses del año, abarcando el 37,2 por ciento del total exportado por Argentina. Por otro lado, debido a la cosecha record de soja, las cantidades exportadas de la oleaginosa pasaron de 3,4 millones de toneladas en los primeros siete meses de 2009 a las actuales 9,2 millones, lo que representó un aumento de 169,4 por ciento.