Por un momento, en el Ministerio de Economía pensaron si no habrán cometido un grave error. Después de firmar las órdenes de pago en favor del Banco Mundial y del BID por un total de 1500 millones de dólares, el Gobierno se enteró de la postergación de la reunión de directorio del FMI. Supuestamente hoy era el día indicado para que ese cuerpo formalizara la aprobación del acuerdo con Argentina, pero desde el organismo señalaron en la tarde de ayer que el encuentro quedó suspendido. La explicación fue que la demora obedece a meras cuestiones burocráticas, pero eso no pudo evitar que en el Palacio de Hacienda se instalara una sensación de intranquilidad. Una versión que llegó de Washington indicó que los directores del FMI se reunirán mañana. Página/12 se comunicó con uno de los voceros del organismo en esa ciudad, que no pudo confirmar ni desmentir el trascendido.
El Gobierno espera que mañana termine la incertidumbre. En rigor, después de que el director gerente del Fondo, Horst Köhler, recomendó la semana pasada la confirmación del acuerdo no parece haber más obstáculos. El directorio del FMI está integrado por los representantes de los países más poderosos, y entre ellos los que más peso tienen son los del Grupo de los Siete. En virtud de que el acuerdo se logró gracias a la presión del G-7, nada hace suponer que el directorio pueda dar marcha atrás con el convenio. Además, sería un gesto excepcional en la historia del FMI, dado que el staff recomienda la aprobación de un tratado sólo si está convenido de antemano con el directorio.
El Banco Central concretó ayer el pago de 812 millones de dólares al Banco Mundial y de 680 millones al BID. El último viernes se habían girado al FMI 1056 millones, lo que redujo las reservas a 9752 millones. Mañana, cuando la autoridad monetaria informe el estado de las reservas al día de ayer, se observará otra merma de 1500 millones. La información siempre refleja los datos con 48 horas de retraso. Los pagos fueron para levantar vencimientos caídos en noviembre, en el caso del BM, y el último jueves, en el del BID. Roberto Lavagna había anticipado que sólo haría los desembolsos si recibía una señal contundente del FMI de que habría acuerdo. Ahora que los pagos fueron hechos, resta esperar que el directorio oficialice el convenio.
Si por algún motivo el directorio tampoco se reuniera mañana, Eduardo Duhalde tendrá la oportunidad de quejarse el sábado ante la mismísima Anne Krueger. El Presidente se encontrará con la dama de hierro del FMI en el Foro Económico Mundial de Davos, Suiza. Desde la Casa Rosada informaron ayer que Duhalde tendrá un encuentro a solas con Krueger.
Una vez producida la aprobación del acuerdo, el Banco Mundial y el BID lanzarán nuevas líneas de crédito para la Argentina. El presidente del primero de esos organismos, James Wolfensohn, adelantó la semana pasada que ya estaba aprobado un préstamo por 1000 millones de dólares para ayuda social, de los cuales 600 millones financiarán el Plan Jefas y Jefes de Hogar. Los desembolsos empezarán a efectuarse sólo después que el directorio del FMI confirme el acuerdo.
Por otra parte, el propio Fondo reintegrará los 1056 millones que se le pagaron el último viernes, dado que el vencimiento que se cubrió con ese dinero fue incluido dentro de la refinanciación de compromisos hasta el 31 de agosto. El acuerdo incluye una reprogramación de pagos por un total de 16.112 millones, contabilizando los tres organismos.