ECONOMíA
› SE RECUPERA EL EMPLEO INDUSTRIAL
Un poco menos malo
En los principales aglomerados urbanos del país el empleo privado formal en empresas con más de 10 trabajadores continuó en diciembre pasado por debajo de los niveles de diciembre de 2001. Sin embargo, el indicador fue positivo en la comparación contra el mes anterior, lo que reflejaría una “detención de la destrucción neta de puestos de trabajo”. Los datos corresponden a la encuesta de indicadores laborales realizada por el Ministerio de Trabajo.
En la comparación diciembre-noviembre los indicadores mostraron que el empleo formal creció en el 0,3 por ciento en el Gran Buenos Aires (tercer mes de alza consecutiva), un 0,4 en el Gran Rosario (cuarto mes de suba), 0,7 en el Gran Córdoba y 0,8 en el Gran Mendoza (segundo mes en ambos aglomerados). Según el relevamiento del Ministerio de Trabajo, fue en la industria manufacturera donde se registró mayor dinamismo en la recuperación del empleo.
En cambio, cuando se observa la comparación interanual, la evolución del empleo fue negativa en los cuatro núcleos urbanos. La caída más grande fue en el Gran Córdoba (-7,8 por ciento), seguido por Gran Buenos Aires (-6,1) y Gran Rosario (-5,2). En tanto, el resultado menos negativo se registró en el Gran Mendoza, con una caída del 2,7 por ciento. Los movimientos de personal, indicados por las incorporaciones y desvinculaciones, representaron en diciembre último un total del 1,8 por ciento del total de la fuerza de trabajo en Buenos Aires, del 1,7 en Rosario, 1,6 en Córdoba y 1,4 en Mendoza. En el Gran Rosario y Gran Mendoza más del 50 por ciento de las incorporaciones fueron, en el mes de diciembre, por aumento de la demanda de empleo. En Gran Buenos Aires y Gran Córdoba esta proporción supera el 35 por ciento. En los cuatro aglomerados, el grueso de las desvinculaciones se deben a bajas decididas por las empresas. La razón más argüida por las firmas fue la reorganización funcional.
La relativamente baja rotación del empleo en el último mes, junto probablemente a los altos niveles de desempleo, se tradujo en menores niveles de conflicto en el Gran Buenos Aires, mientras que se mantuvo estable en los tres núcleos restantes. En cuanto a las expectativas de las empresas, más del 85 por ciento de las firmas esperan mantener estables su dotaciones de personal en los próximos tres meses.