La Confederación General del Trabajo de la regional San Lorenzo (Rosario) inició ayer un paro por tiempo indeterminado en las terminales portuarias del cordón norte del Gran Rosario. Los trabajadores de la construcción, los recibidores de granos y los de la Marina Mercante reclaman un salario mínimo de 5000 pesos, semejante al logrado en diciembre del año pasado por el sindicato aceitero. La medida afecta a los puertos cerealeros de Nidera –compañía acusada de contratar trabajadores en condiciones infrahumanas–, Cargill, Bunge, ACA y Molinos Río de la Plata, entre otros. La cámara que nuclea a las compañías aceiteras rechaza la incorporación de los gremios de la CGT al convenio de su sector.

La medida de fuerza fue declarada luego de una reunión realizada en el Ministerio de Trabajo de la provincia, de la que participaron la viceministra del área, Nora Ramírez; el presidente de la Cámara de Comercio de San Lorenzo, Alberto Jackobson, y el titular de la CGT de esa región, Walter Cabrera. Como no se llegó a un acuerdo con el sector empresario, los dirigentes dispusieron el cese de actividades en los distintos puertos.

“Hoy logramos instalar piquetes en la mayoría de las terminales, por lo que no hubo ingreso de camiones ni tampoco se registraron embarques. Además, los trabajadores aceiteros se solidarizaron con nuestra determinación y tampoco concurrieron a las plantas, por eso mismo la inactividad fue total”, señaló Cabrera. Sin embargo, desde la Bolsa de Comercio de Rosario indicaron que a las playas de los puertos de la zona norte del Gran Rosario ingresaron aproximadamente 1000 camiones y otra igual cantidad en las terminales de la zona sur (Arroyo Seco-Villa Gobernador Gálvez).

Los gremios nucleados en la CGT que cumplen con la medida son la Unión Obrera de la Construcción (Uocra), la Unión de Recibidores de Granos y Anexos de la República Argentina (Urgara), los trabajadores de la Marina Mercante y los de Seguridad. Este reclamo se adelantó a las negociaciones paritarias que a nivel nacional suelen arrancar en marzo.

En todo el cordón industrial de Santa Fe, desde las ciudades de Arroyo Seco hasta Timbúes, se exporta aproximadamente el 70 por ciento de granos, aceite y harina de soja. Por otro lado, en estas terminales se procesan por día 125.000 toneladas de oleaginosas, básicamente soja.

El director ejecutivo de la Cámara Aceitera (Ciara), Alberto Rodríguez, señaló que “la CGT en ningún caso ha discutido salarios” con su sector. “Estas discusiones se dan en las negociaciones paritarias correspondientes a la actividad. Los que por alguna razón quieran participar de los convenios de otros gremios tienen que discutirlo en otras mesas de negociación”, señaló Rodríguez.

Tras la reunión fallida en el Ministerio de Trabajo local, los funcionarios provinciales intentarán volver a la mesa de negociación para destrabar la situación. “Esta protesta está fuera de lugar y así no se puede discutir. Tienen que calmarse los ánimos para que pueda encararse una mesa tripartita, donde se analice la posibilidad de incorporar algunas tareas particulares de otros gremios dentro del convenio de las aceiteras. Esto ya lo veníamos haciendo con entre los aceiteros y los trabajadores tercerizados”, reconoció el director ejecutivo de Ciara.