Las acciones líderes finalizaron ayer con una caída de uno por ciento. La Bolsa porteña no pudo escapar así a la tendencia bajista que se registró en las principales plazas internacionales. Analistas encontraron una justificación de ese mal desempeño en los temores que generó el conflicto político de Egipto. Los títulos públicos fueron todavía más castigados con retrocesos de hasta casi 3 por ciento. Este desempeño, combinado con la preferencia de los inversores por bonos del Tesoro estadounidense como refugio, disparó el riesgo país 48 puntos, hasta 536 unidades. El dólar cerró sin cambios, pero concluye la semana con una suba de un centavo, al cotizar a 4,02 pesos. El mayorista cerró en su máximo histórico, en los 4 pesos.

La excusa esta vez fue la ola de protestas populares reprimida con violencia en Egipto, donde su presidente, Hosni Mubarak, decretó el toque de queda en El Cairo, Alejandría y Suez. El mayor impacto lo registró el petróleo, que subió 4,3 por ciento, al negociarse a 89,36 dólares el barril de crudo WTI. Esto respondió a temores de que el canal de Suez, paso seguro del crudo y gas hacia Europa, podría cerrarse si continúan los problemas institucionales en el país africano. En Wall Street, el índice industrial Dow Jones retrocedió 1,4 por ciento, y el tecnológico Nasdaq se desplomó 2,5 por ciento.

En tanto, la Bolsa porteña sufrió el efecto contagio. El índice MerVal retrocedió 0,9 por ciento, al ubicarse en 3583 puntos, y en la semana resignó 1,8 por ciento. De todos modos, el volumen volvió a ser reducido, de apenas 46,2 millones de pesos, lo que le quita trascendencia a ese ajuste. El escaso monto de negocios tuvo también que ver con inconvenientes técnicos que sufrió el sistema informático de la Bolsa de Comercio, que dejó durante casi una hora y menos sin actividad al mercado. Dentro del panel escaparon de la baja Ledesma (subió 1,9 por ciento), Tenaris (0,7), Transener (0,6) y Petrobras (0,5),

La pérdida en bonos se focalizó en los que nacieron en el canje de deuda en default. El Par cedió 2,7 por ciento, mientras que el Discount perdió 1,9 por ciento. El cupón de PIB, en dólares, se retrajo 2,9 por ciento. Con un margen más acotado se anotaron las bajas del Bogar 2018 (0,9 por ciento) y el Boden 2015 (1,3). La única suba se verificó en el Boden 2012, que se entregó a los ahorristas por sus depósitos atrapados por el corralito, que avanzó 0,7 por ciento. El riesgo país, que registra el diferencial de tasa entre los bonos soberanos y similares de los Estados Unidos, subió a 536 puntos básicos, lo que equivale a un avance de 12,1 por ciento en la semana.

En el microcentro porteño, el ajuste en pizarra que exhibió el billete verde en los últimos días respondió a la escasez de divisas que se verificó en la semana. El fin de la cosecha gruesa de trigo, la cual será reemplazada a partir de abril por la de soja, sumado a los conflictos que se verificaron desde el miércoles pasado en los puertos del norte del Gran Rosario, explican la escasa oferta de dólares. Por su parte, el Banco Central convalidó la suba gradual que se verifico en el segmento mayorista.

El dólar mayorista superó ayer los 4 pesos por primera vez desde la salida de la convertibilidad. En la semana subió un centavo y medio. Las reservas internacionales del Banco Central concluyeron en 52.564 millones de dólares, luego de que el Central debiera realizar pagos a organismos y algunas operaciones puntuales de venta de dólares para evitar una mayor suba de la divisa. El euro se mantuvo en 5,49 pesos y el real en 2,49 pesos.