El euro continuó su escalada en abril. La moneda comunitaria empezó el mes en 5,74 pesos y terminó ayer en 6,11, una suba de 37 centavos o 6,4 por ciento. En lo que va del año, el ajuste es de 83 centavos, un 15,7 por ciento. El desempeño de la divisa en el mercado local fue un fiel reflejo de los movimientos cambiarios internacionales, donde el dólar se retrajo a 1,50 unidad por euro. En la plaza local, el billete verde tuvo una leve apreciación de cuatro centavos, a 4,11 pesos (0,98 por ciento).

A pesar de las subas, analistas del mercado advierten sobre la alta volatilidad y el riesgo de especular con divisas. “Lo del euro es una sobrerreacción local, y no tiene mucho fundamento para que siga subiendo”, indicó a este diario Diego Martínez Burzaco, portfolio manager de Puente. La cotización doméstica del euro tiene un alto componente especulativo: las casas de cambio, para cubrirse de los “saltos” de la moneda, suman algunos centavos al ajuste que deberían aplicar en compensación con el movimiento externo. El dólar se mantuvo ceñido a los límites que la intervención del Central impone a diario en el segmento mayorista. El stock de reservas concluyó abril en 52.001 millones de dólares, contra 51.298 millones de inicio del mes (803 millones más), mientras que en el año registra una baja de 144 millones (arrancó en 52.145 millones).

En materia bursátil, abril volvió a privilegiar los títulos públicos. Los cupones de PIB permitieron una ganancia de 7,8 por ciento en el mes, guarismo que se extiende a 11,5 en el año. El resto de los bonos tuvo evoluciones más discretas: promediaron un retroceso de 0,2 por ciento, aunque en el año acumulan un saldo positivo de 0,4. El panel Merval, en tanto, cerró ayer con una alza de uno por ciento, llevando a 0,5 por ciento el resultado positivo del mes. En el año mantiene un rojo de 4 por ciento.