La Corte Suprema dispuso ayer que las apelaciones recientes contra el corralón sean atendidas en las secretarías de las cámaras de distintos fueros. La Corte Suprema se expidió de esta manera sobre el reclamo de la Cámara en lo Contencioso Administrativo por la acumulación de expedientes que colman el espacio físico del tribunal e imposibilitan dar trámite a unas 30.000 causas.
El presidente de la Cámara, Pablo Gallegos Fedriani, había autorizado a mantener los expedientes con recursos de apelación en la Secretaría General y suspender su distribución hasta obtener una respuesta al problema planteado. La Corte expuso que, en dos oportunidades, se dirigió al Ejecutivo para que se habilitara a jueces de otros fueros “sin obtener la solución propiciada”.
El máximo tribunal recordó que “la notoria insuficiencia de los recursos presupuestarios del Poder Judicial impide atender los diversos requerimientos efectuados por la cámara con respecto a designaciones de personal y provisión de locales, mobiliario y equipos informáticos aptos para superar la situación que se presenta”. Las nuevas secretarías afectadas son las de las distintas salas de apelaciones de las cámaras en lo Civil y Comercial Federal, Civil y del Trabajo.