La actividad de la construcción retrocedió 5,2 por ciento en febrero respecto del mismo mes del año pasado, al tiempo que acumuló una caída de 1,7 por ciento en el primer bimestre de 2014. Así lo informó ayer el Indec. La obra privada residencial y las construcciones petroleras registraron los retrocesos más relevantes, por una base de comparación más elevada y el incremento de los días con lluvia respecto del verano de 2013. La obra vial, que muestra el esfuerzo inversor del Estado en edificaciones, anotó en febrero un alza del 3,3 por ciento interanual. Los despachos de cemento al mercado interno cayeron 3,1 por ciento.

La desaceleración de la actividad económica en los primeros meses de este año, por efecto de la corrida cambiaria, el incremento desmedido de precios y la inestabilidad del mercado impactó en el sector de la construcción. La mayor cantidad de lluvias y el efecto estadístico de una base de comparación más elevada, por la recuperación de 2013, también explicaron el menor dinamismo. Tras 12 meses consecutivos de incrementos interanuales, la rama de la edificación anotó una caída del 5,2 por ciento en febrero. El retroceso también se registró en el desempeño de las ventas de asfalto al mercado interno, con una caída de 19,4 por ciento, y se repitió en cemento (-3,1), ladrillos huecos (-10,5) y pinturas para la construcción (-14,4). A diferencia de estas performances, el despacho de pisos y revestimientos cerámicos avanzó 34,9 por ciento, al tiempo que el de hierro redondo para hormigón anotó un alza del 12,1 por ciento interanual.

Uno de los bloques de la construcción que computó el mayor retroceso fue edificación residencial de privados. Anotó una caída de 6,6 por ciento respecto de febrero de 2013. El programa de créditos subsidiados de la Anses había entrado en vigencia el año pasado, por lo que a partir de 2014 se empieza a diluir su efecto expansivo sobre las estadísticas. A su vez, las condiciones del clima, con un aumento de las precipitaciones, y los incrementos desproporcionados de precios, luego de la devaluación de los últimos días de enero, potenciaron el parate.

Además de la caída de la construcción de vivienda particular, la obra privada no residencial (ampliación y refacción de establecimientos productivos) anotó una disminución de 3,9 por ciento interanual. La corrida hacia el dólar de las primeras semanas de 2014 fue un factor que alteró decisiones de inversión de particulares. El fenómeno empezó a revertirse a mediados de febrero, gracias a la estabilidad del tipo de cambio y la moderación de la caída de las reservas internacionales del Banco Central, con mayor liquidación de cosecha y un retroceso de expectativas de devaluación del mercado. En cuanto a las edificaciones petroleras, la baja fue de 18,1 por ciento.

El esfuerzo inversor del Estado en el sector de la construcción se mantuvo durante febrero, cuando se anotó un incremento del 3,3 por ciento interanual de la obra vial. Algunos de los proyectos de envergadura que empezaron a construirse el año pasado y continúan en 2014 son la repavimentación y ampliación de la Ruta Nacional 40, un camino que recorre de Norte a Sur el país. La puesta en marcha de esta obra estratégica para la conexión territorial requirió 5000 millones de pesos. Por su parte, el bloque otras obras de infraestructura anotó una caída de 1,5 por ciento el mes pasado respecto de 2013.