La venta de maquinaria agrícola retrocedió 37,8 por ciento en el primer trimestre respecto del mismo período del año pasado, según lo informó ayer el Indec. Las unidades importadas registraron las caídas más fuertes, con una merma de la demanda del 51,6 por ciento, mientras que los equipos locales anotaron una baja de 30,5 por ciento. El sector, a pesar de esta floja performance, registró un notable crecimiento durante los últimos años, gracias a la expansión de las cosechas y los incentivos macroeconómicos para la inversión.

En el primer trimestre, los despachos de maquinaria agrícola ascendieron a 1525,8 millones de pesos, contra 1853,1 millones durante el mismo período del 2013 y de 828,8 millones en 2012. Como referencia, valga considerar que en el primer trimestre de 2004, las ventas de maquinaria argentina sumaron 142 millones de pesos, al tiempo que el consumo de importadas ascendió a 442,9 millones de pesos.

En cuanto a la evolución en cantidades, en el primer trimestre del año las compras alcanzaron los 2422 equipos, cuando habían sido de 3893 unidades en el mismo período de 2003. En una desagregación por bloques, se indicó que la demanda de cosechadoras fue de 166 unidades, contra 386 unidades del año pasado; la de tractores alcanzó 818 unidades, contra 1499; la de sembradoras, 136, contra 236, y la de implementos, 1302, contra 1772.