El secretario de Política Económica, Emmanuel Alvarez Agis, confirmó ayer que se analiza junto con el Banco Central la posibilidad de regular las tasas de interés que cobran los bancos. “En estos días hubo dos reducciones de la tasa de las Lebac y estamos viendo cómo reacciona el sector”, dijo Alvarez Agis en declaraciones a la prensa acreditada en el Palacio de Hacienda. El viceministro se refirió a las tasas de interés de todo el sistema financiero, pero hizo hincapié en el costo de los saldos deudores de las tarjetas de crédito –surge de la diferencia entre el vencimiento y el pago del mínimo– que en algunas entidades de primera línea llegan al 80 por ciento anual. Esta advertencia se suma a la que esgrimió el lunes de esta semana el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, quien calificó de “usurarias” las tasas que cobran algunos bancos privados en el país.

Tras la crítica vertida por el jefe de ministros, el Directorio del BCRA dispuso un recorte de un punto porcentual sobre el rendimiento de las letras que ofrece a los bancos para absorber parte de la liquidez del sistema financiero. Es el segundo recorte del mes –el anterior también fue de un punto porcentual–, con el que la entidad que conduce Juan Carlos Fábrega, en sintonía con el pedido del Palacio de Hacienda, pretende direccionar una baja en las tasas de interés que, junto con el aumento en las comisiones y gastos administrativos de los bancos, encarece el crédito hasta un ciento por ciento anual para el caso de créditos al consumo. En tal sentido, Alvarez Agis apuntó contra el financiamiento de los saldos impagos de la tarjeta, debido a que se trata de un crédito tomado previo a la suba de tasas del sistema.

“No son todas las situaciones iguales, pero en el caso de los saldos de tarjeta, los consumidores no tienen salida. Distinto es si para sacar un crédito se pide una tasa exorbitante; porque en este caso uno puede decidir si lo toma o no, pero sobre los saldos no hay forma de escaparse”, aseguró el funcionario. “Se puede entender si un banco utiliza la suba de tasa para restringir el crédito por temor a problemas económicos, pero no es posible que lo hagan con los saldos”, agregó. El funcionario sostuvo que están “analizando si, a partir de los cambios implementados en la Carta Orgánica del Banco Central, se puede regular en forma coordinada con el Ministerio de Economía la tasa de interés que cobran los bancos, como por ejemplo, las que se pagan por el saldo deudor en las tarjetas de crédito”, detalló Agis.

El viceministro desacreditó las versiones que revelan discrepancias con la conducción del Central: “La forma en la que estamos trabajando en este tema lo demuestra”. También aseguró que en Economía “hay indicios de que la inflación se desaceleró en abril, especialmente por el lado de los alimentos”. En ese sentido, apuntó contra el titular del Banco Macro y de Adeba, Jorge Brito. “Según Brito, el problema de la inflación es por el déficit fiscal, y para reducirlo hay que quitar los subsidios, no a los sectores sociales. Si hacemos eso, la tarifa eléctrica tendría que multiplicarse por cinco, y la de transporte por diez, y eso lo que haría es subir, y mucho, la inflación. Así que este razonamiento no tiene mucho sentido”, enfatizó.

Por último, en referencia a los problemas que se exhiben en el sector automotor, el viceministro recordó que el titular de la Unión Obrera Metalúrgica, Antonio Caló, había dicho que “no hay problemas de empleo” y que la merma que se observa en la venta y producción de unidades respecto del año pasado, “se debe a una confluencia de factores, como la caída de la demanda en Brasil, el aumento de costos por el corrimiento del tipo de cambio y a una suba en los precios en el mercado local”. “La suba en los autos “no fue convalidada por el mercado y ahora aparecen ofertas de venta con descuentos del 10 y el 15 por ciento. Algo similar ocurrió en el mercado de electrodomésticos”, agregó.