Argentina y Brasil acordaron extender hasta el 30 de junio del 2015 el Acuerdo Automotriz Bilateral. “Se marcaron pautas para la participación de las empresas. La idea es balancear el comercio con acuerdos entre privados, dar previsibilidad a la balanza comercial y al flujo de divisas”, sostuvo Axel Kicillof, ministro de Economía, durante una conferencia de prensa. “Le dimos horizonte y previsibilidad a un sector que reúne a 140.000 empleados sólo en Argentina”, manifestó Débora Giorgi, ministra de Industria, quien destacó que “a partir de ahora trabajaremos en una hoja de ruta para tratar todos los temas de integración sectorial que les permitan a ambas naciones ganar terceros mercados”.

El acuerdo se alcanzó luego de una reunión que mantuvieron en el Palacio de Hacienda los ministros Kicillof, Giorgi y el canciller Héctor Timerman, junto al titular de Industria de Brasil, Mauro Borges.

“Queremos destacar la creación de un Comité Automotor permanente que tendrá a su cargo el seguimiento constante del cumplimiento de las bases acordadas”, sostuvo Borges, quien destacó que “el Flex de 1,5 se encuentra dentro de las proporciones de los niveles históricos del comercio bilateral”.

“El Comité Automotor trabajará, además, en las negociaciones comerciales con terceros países y/o bloques de países y en las directrices para un régimen automotor del Mercosur”, sostuvo la cartera de Industria a través de un comunicado.

“Estos acuerdos son un capítulo más en este diálogo que tenemos Argentina y Brasil en la defensa de nuestros intereses”, afirmó Timerman, quien aprovechó para “agradecer” la posición brasileña, favorable a la Argentina, frente a los fondos buitre.

A su vez, Giorgi reiteró “la decisión política de mantener la industria autopartista local”, pero también recalcó la necesidad de “avanzar en la calidad” de los productos que se producen en el país.

El acuerdo en el sector automotor aparece como central para la búsqueda del equilibrio comercial entre ambas naciones.