“Los que dicen que se cerraron 300.000 cuentas sueldo como un termómetro del desempleo están cometiendo un acto de falsedad absoluta. Si es un hecho de buena fe, es un error y, si no lo es, es una campaña.” Con estas palabras, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, cuestionó a quienes interpretaron el cierre de estas cuentas como un indicador fehaciente de las condiciones laborales. “Las cuentas sueldo tienen una alta movilidad”, agregó el ministro coordinador. De hecho, según información oficial, de los últimos doce años, en ocho de ellos hubo una merma de las cuentas sueldo en el primer trimestre del año, en comparación con el trimestre anterior.

Según datos oficiales del Banco Central, la cantidad de cuentas sueldo crecieron en el lapso de un año en 70.477, al sumar un total de 7.717.422, mientras que el número de empresas que utiliza este tipo de servicio para el pago de haberes son 154.493, con un crecimiento de 8959 firmas.

Para analizar el movimiento de las cuentas sueldo debe tomarse un año completo, ya que la comparación trimestre contra trimestre está sujeta a los vaivenes estacionales. Por ejemplo, en diciembre suelen crearse puestos de trabajo vinculados a las ventas navideñas y de fin de año, empleos que caducarán en los primeros meses del año siguiente.

El informe del Banco Central sobre la estructura del sistema financiero precisó que en marzo de 2013 la cantidad de cuentas sueldo sumaba 7.646.975, número que trepó hasta una marca de 8.029.168 en diciembre, para luego retroceder por cuestiones estacionales a 7.717.422 cuentas en marzo del corriente año.

Durante el debate parlamentario por la Ley de Abastecimiento y el resto de las normativas vinculadas a la defensa de los derechos de los consumidores, el senador Ernesto Sanz utilizó el argumento del desempleo justificado por esa variación en las cuentas sueldo. Ayer fue desmentido por el propio BCRA y el ministro coordinador.