El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, sostuvo ayer que el aumento en las facturas de gas responde a un incremento en el consumo por parte de los usuarios. “El sistema de incentivos era que quien disminuía el consumo tenía un tratamiento equivalente desde el punto de vista del sostenimiento de la tarifa, por lo tanto es, primero, un incremento notorio del consumo”, argumentó el jefe de ministros en respuesta a las denuncias de parte de usuarios, a quienes les llegaron facturas con incrementos de hasta 670 por ciento. Capitanich remarcó que la evolución de la tarifa de gas es “sustancialmente inferior” en comparación con el aumento del salario mínimo, vital y móvil, que –sostuvo– superó el 2000 por ciento en once años, aunque en este último caso la suba fue gradual.