La actividad de la construcción avanzó 3,2 por ciento en septiembre respecto del mismo mes del año pasado, mientras que registró en lo que va del año una caída del 1,2 por ciento, según lo informó ayer el Indec. La edificación de viviendas particulares fue uno de los bloques del sector que registró la mayor tasa de crecimiento, gracias al impulso del programa de créditos subsidiados de la Anses. A su vez, las obras petroleras anotaron una fuerte expansión a través de la inversión de YPF en el rubro de hidrocarburos, con el objetivo de recuperar el autoabastecimiento energético. El Gobierno avanzó en las últimas semanas con medidas clave para potenciar el crecimiento de estos bloques, donde se destacó la duplicación de los recursos para financiar Pro.Cre.Ar y la aprobación reciente de la Ley de Hidrocarburos.

La construcción anotó una importante recomposición en septiembre, tras las fuertes caídas de los últimos meses, cuando las decisiones de inversión de la población se vieron frenadas por la devaluación de enero, la incertidumbre cambiaria del resto del año y el incremento desmedido de costos del mercado interno. En septiembre, la rama de la edificación anotó una expansión desestacionalizada del 1,8 por ciento en relación con agosto, mientras que la cifra con estacionalidad ascendió al 8,4 por ciento. El movimiento de la construcción en septiembre adquiere relevancia si se tiene en cuenta que permitió moderar en más de un punto porcentual la contracción acumulada del sector en lo que va del año, la cual pasó de un retroceso de 2,3 a uno de 1,2 por ciento.

La edificación de viviendas particulares fue uno de los segmentos con mejor desempeño en septiembre, al aumentar 10,3 por ciento respecto del mismo mes del año pasado. El rol del programa de préstamos hipotecarios del sector público fue central para explicar esta expansión. Los últimos datos del Pro.Cre.Ar, según la Anses, reflejaron que desde su lanzamiento en 2012 ya se otorgaron 131.569 préstamos para la vivienda, de los cuales 98.514 créditos fueron a través de la línea individual y 33.055 a través de la línea de desarrollos urbanísticos (donde el Estado construye directamente y entrega el financiamiento para la compra de los hogares terminados). En total existen 95 desarrollos urbanísticos en construcción a lo largo del país. Las viviendas que ya se terminaron de construir a partir del programa estatal sumaron 54.226 hogares. Estos datos adquieren relevancia si se tiene en cuenta que el Gobierno duplicó esta semana los fondos para financiar el Pro.Cre.Ar, lo cual implica inyectar a la economía más de 35 mil millones de pesos en los próximos semestres. El objetivo del Gobierno es alcanzar 200 mil préstamos adjudicados para fines de 2015.

Otro de los bloques de la construcción que anotó una fuerte expansión fue el de las obras petroleras, las cuales avanzaron en septiembre 20,2 por ciento en relación con el mismo mes del año pasado. Las inversiones de la petrolera YPF, controlada por el Estado nacional, para avanzar en la recomposición del autoabastecimiento energético fueron clave para explicar la performance de estas edificaciones. La aprobación de la Ley de Hidrocarburos en las últimas semanas fue relevante para potenciar las perspectivas de crecimiento de este sector en los próximos años, puesto que es un incentivo para el arribo de inversiones extranjeras destinadas a exploración y explotación de hidrocarburos.

El desarrollo de la formación Vaca Muerta es uno de los proyectos con mayor impacto para el sector de las obras petroleras. Estimaciones de la consultora Accenture indicaron que en las próximas dos décadas ingresarían más de 16 mil millones de dólares en inversiones por año para explotar este yacimiento de crudo y gas no convencional, mientras que se crearían cerca de medio millón de puestos de trabajo directos e indirectos. Las inversiones en Vaca Muerta adquieren relevancia si se tiene en cuenta que, según Accenture, la Argentina podría recomponer el autoabastecimiento antes de 2020.