La producción de acero crudo en diciembre fue de 446.200 toneladas, con un incremento de 2,9 por ciento respecto del mismo mes de 2013. En todo el año pasado, la producción ascendió a 5.488.200 toneladas, con un aumento del 5,8 por ciento interanual. Así lo informó la Cámara Argentina del Acero. Pese a la desaceleración de la industria manufacturera, la rama registró uno de los mejores años de la última década. “La fabricación anual de 2014 es la cuarta mayor producción de acero crudo de los últimos diez años, sólo superada por 2006, 2008 y 2011”, destacaron desde la entidad. Aseguraron a este diario que ese desempeño es el resultado de una política de inversiones de largo plazo, en la cual se destinaron cerca de 500 millones de dólares en 2014 para ampliar la capacidad productiva. La recomposición de la actividad de la construcción durante los últimos meses del año pasado fue un factor relevante para impulsar los despachos del metal en el mercado interno.

La rama del acero registró un crecimiento notable durante la última década, al pasar de producir de 4 a más de 5 millones de toneladas por año. La expansión de la economía local tuvo un papel relevante para explicar este desempeño. El record de negocios en obras petroleras, terminales automotrices, edificación para vivienda y establecimientos productivos, entre otros, potenciaron el consumo de acero a nivel doméstico. “Somos un sector optimista y creemos que la demanda va a seguir aumentando en los próximos años”, indicaron en la entidad que agrupa a los fabricantes de la rama.

Las exportaciones fueron otro factor de expansión para el sector, lo cual requiere observar que a principios de los ’90 se exportaban 470 mil toneladas de tuberías de acero sin costura, mientras que en los últimos años se alcanzó un pico de despachos de más de 726 mil toneladas. La Argentina es uno de los exportadores importantes de acero a nivel mundial, metal que se ofrece en planchas laminadas, funciona como un commodity industrial y se destina mayoritariamente para la fabricación de automóviles y la construcción. Las empresas locales que tienen capacidad para colocar producción en el mercado internacional son Siderar y Tenaris, del grupo Techint, y Acindar, del grupo Arcelor Mittal.

Estas firmas concentran la actividad interna con capacidad para fijar precios debido a su poder de mercado. Un informe del Centro de Investigación y Gestión de la Economía Solidaria (Ciges) relevó que entre 2003 y 2013 el valor de la chapa de acero trapezoidal subió 907 por ciento, cuando el tipo de cambio nominal anotó un incremento del 428 por ciento y los salarios del sector de insumos difundidos subieron 780 por ciento. Estas cifras no resultan menores porque el acero, al igual que el aluminio y el cemento, son productos clave en cadenas de valor de la industria. Esto implica que son materias primas para la fabricación de gran parte de los bienes consumidos por la población, desde electrodomésticos, autos, alimentos, bebidas, entre otros. “Son los precios que no se ven, los precios que están detrás de los precios”, aseguraron en el Ciges.