La AFIP lanzó un plan de financiamiento de deudas impositivas y previsionales, a pagar en hasta 120 cuotas, por las obligaciones en mora al 28 de febrero pasado. El programa de regularización, anunciado ayer por la Presidenta de la Nación, está destinado a empresarios y monotributistas. El período de inscripción estará abierto hasta el 31 de mayo y entre sus requisitos contarán que las empresas que adhieran no podrán despedir personal durante su vigencia. Además, una mora de 30 días en la cuota o en el pago de las obligaciones impositivas corrientes (las que venzan mientras dure el plan) determinará la caducidad o caída del plan de facilidades.

La posibilidad de regularización abarca las deudas por los diferentes tributos –IVA, Ganancias, etc.–, aportes –cuotas de monotributo– y contribuciones patronales sobre el personal empleado. La deuda se integrará en una única suma sobre la cual se establecerá un plan único de pago.

Según los datos aportados ayer por Cristina Fernández, la morosidad acumulada al 31 de diciembre último por deudas con la AFIP o la Anses ascendía a 60.525 millones de pesos, correspondientes a obligaciones de 1.222.907 contribuyentes. El último día del año 2014 también será considerado como fecha de corte para el control de planta de las empresas que requieran ser beneficiarias del plan, “porque el último trimestre suele ser el de mayor nivel de ocupación”, explicó la Presidenta. Ante las solicitudes de financiamiento, se tendrá en cuenta la nómina de trabajadores que componen la planta al momento de la solicitud respecto de la misma planta al 31 de diciembre. “Así que si alguna empresa echó gente desde esa fecha y está pensando en regularizar sus deudas con el fisco –advirtió la jefa de Estado–, mejor que vaya reincorporándola y quedamos todos amigos. No les vamos a financiar ninguna deuda a empresarios que echan gente y que no mantengan a los trabajadores, esto ha sido la regla en anteriores medidas.”

Otros requisitos del plan de financiación es que la cuota para las empresas no podrá resultar menor a 500 pesos. Esto es para que, por montos de deuda menores, no se extienda tanto el plan (las 120 cuotas, o diez años, funciona como plazo máximo). Para monotributistas, la cuota mínima será de 150 pesos. La tasa de interés será de 1,9 por ciento mensual. Los contribuyentes que adhieran estarán obligados a cancelar el 7 por ciento de la deuda en la primera cuota. El saldo se financia en las 119 cuotas restantes. Por otra parte, quienes adhieran al plan para financiar las deudas al 28 de febrero deberán estar al día con los vencimientos de marzo, abril y mayo de este año.

En su alocución desde el Salón de las Mujeres del Bicentenario de Casa Rosada, Cristina también cuestionó que haya empresarios que elijan endeudarse con la AFIP o la Anses “porque es más barato que financiarse con un crédito bancario”. Al respecto, anticipó que una vez cerrada la inscripción de contribuyentes al programa de regularización presentado ayer, “las tasas de interés por mora y punitorios serán más caras que los que se cobran por financiarse en un banco”. “Este es un plan muy amplio, para ayudar, pero no para avivadas”, sentenció.

El último plan de facilidades de pago de deudas fiscales había sido lanzado en abril del año pasado, para obligaciones vencidas al 31 de marzo de 2014. Pero tenía un plazo de pago mucho más corto. La Resolución General 3630 establecía que “la deuda de los contribuyentes vencidas al 31 de marzo de 2014 podrá pagarse en un plazo de 24 cuotas, con una tasa mensual de financiación de 1,9 por ciento”. Al igual que en la nueva regularización, se exigía que para adherir al plan de facilidades los contribuyentes deberían cancelar todas las obligaciones a vencer entre la fecha de corte de deuda (31 de marzo) y el último plazo para la adhesión (29 de agosto).

En aquel momento, la AFIP estimó que alrededor de 1.220.000 contribuyentes presentaban algún grado de morosidad al 31 de marzo. Una cantidad similar a la informada ayer por la Presidenta de la Nación, pero al 31 de diciembre pasado.